4.2 Mitos y creencias falsas sobre la LSE

22/12/2018 10 min
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Síntesis del Episodio

Falsos mitos sobre las personas sordas o con algún tipo de hipoacusia:

1. Si se habla muy fuerte las personas sordas entienden lo que se les dice. Este mito es totalmente falso e incluso se puede considerar una falta de respeto; por mucho que se eleve el tono, no significa que la persona sorda pueda entender el mensaje. De hecho, si la persona sorda lleva algún tipo de implante, cuanto más alto se le hable peor oye.

2. La LS es universal. Falso. Cada país tiene su propia lengua de signos, incluso en un mismo país se pueden hablar varias lenguas de signos, en concreto en España se distingue entre la LS Española y la LS Catalana y, algunos ya apuntan a la inclusión de la LS Valenciana. No obstante, es cierto, que con el fin de tener un nexo común a nivel internacional existe un sistema (que no lengua) de signos internacionales que se emplea en reuniones internacionales como las reuniones de la Federación Mundial de Sordos, o las Sordolimpiadas, con el intento de crear un sistema internacional para las personas sordas de todo el mundo. Entre sus características destaca que no se puede considerar una lengua natural, ni tampoco tiene una gramática propia; usa algunos aspectos gramaticales básicos y cuenta con un léxico limitado.

3. Todas las personas sordas, son también mudas. Este mito también es falso, ya que la capacidad física para la emisión del lenguaje no tiene porqué estar dañada. De hecho, el sistema de comunicación denominado bimodal, utiliza tanto la LSE como la LOE. De esto se deriva que es totalmente incorrecto la denominación arcaica y errónea de denominar a todas las personas sordas como "sordomudos".

4. Las personas sordas o con hipoacusia no hacen ruido. Al no poder oír sus propios movimientos, las personas sordas son igualmente ruidosas que una persona oyente, incluso, en algunos casos pueden ser incluso más ruidosa.

5. La estructura de la gramática en la LSE es igual que la LOE. Falso. La estructura gramatical de la LSE es diferente de la Lengua Oral. De hecho, en la LSE se suele signar priorizando la información, es decir, de lo más específico a lo más general, por lo que los adverbios, las partículas interrogativas, etc., suelen ir al final de la frase.

6. Las personas sordas no pueden conducir. La conducción requiere de la visión principalmente por lo que no es una actividad que esté limitada para las persona sordas.

7. El uso de la LSE influye de forma negativa en el desarrollo de la lengua oral. Es totalmente incorrecto, de hecho, el uso de la LSE favorece la comprensión y la expresión de la lengua oral.

8. Todas las personas sordas saben hablar en LSE. Falso. De hecho, esto no depende de que se tenga una discapacidad, sino que va a depender del acceso que haya podido tener esa persona a la LSE, si utiliza ayudas técnicas, o si utiliza la lectura labial.

9. Si un niño/a tiene la posibilidad de tener un implante no merece la pena enseñarle LSE. Este mito es totalmente falso, e incluso perjudicial para el menor. A más herramientas de comunicación que se le faciliten al menor, mejor se va a desenvolver en su entorno. Además, los implante o audífonos no pueden solventar la disfunción de forma total en todos los casos, por lo que en algunas situaciones, los implante o audífonos facilitan la audición de ruidos ambientales pero sin llegar a igualarse a la capacidad auditiva sin disfunción.

10. Las personas sordas que tengan algún implante pueden oír igual que si no fueran sordas. Este mito es totalmente falso y además perjudicial para las personas sordas. Es verdad que con ayuda de las ayudas técnicas actuales, las personas sordas pueden oír ruidos, y en los mejores casos pueden oír el lenguaje oral, pero no se puede decir que escuchan igual que una persona oyente. En este sentido, no es extraño encontrar a personas sordas que usan implante y que necesitan quitárselos de vez en cuando, ya que los ruidos pueden ser molestos e incluso distractores. También hay que tener en cuenta que hay muchos tipos de sordera y que hay casos en los que es imposible usar ninguna prótesis auditiva ya que no queda ningún resto auditivo o la sordera es muy profunda.

11. Las personas sordas, pueden escribir y leer como una persona oyente. La lectura y la escritura se fundamentan sobre la estructura y gramática de la Lengua Oral, por lo que en su aprendizaje una persona oyente aprende asociando fonemas (sonoros) a su escritura. Las personas sordas no tienen posibilidad de aprender esa asociación, por lo que sin una intervención temprana, es muy difícil que puedan tener el mismo nivel de lectoescritura que una persona oyente.

12. Todas las personas sordas saben leer los labios. La lectura labial, no es una técnica innata, requiere de un aprendizaje que no todos llegan a dominar, además, se debe ser conocedor de la gramática de la Lengua Oral, así como de la interpretación del lenguaje no verbal de la persona hablante y del entorno que lo rodea para poder entender el mensaje de forma más completa.

13. Las personas sordas no se comportan igual que las personas oyentes. En este sentido, las personas sordas realizan las mismas actividades (comer, dormir, jugar, aprender...) que las personas oyentes, la diferencia es que utilizan otra lengua, por lo que este mito queda desmentido.

Además, también existen una serie de falsas creencias en aspectos que competen a la interacción con las personas sordas o hipoacúsicas:

1. Algunos tienen la falsa creencia de que no tiene sentido empezar a hablar al menor, o aprender LSE si le van a implantar un implante coclear. Aunque tenga la posibilidad de tener un implante, este no lo tendrá puesto en todo momento, además, los estímulos auditivos son mucho más complejos de asimilar, sobre todo en los primeros meses tras el implante. Es recomendable que se utilice la LSE como una herramienta más de comunicación o en su defecto, no aplazarla hasta el implante, se pueden usar técnicas alternativas como la expresividad, los dibujos, el mimo... Es importante que el menor tenga distintas opciones. Igualmente, es importante que se tome conciencia de que la LSE es una lengua oficial más, por lo que ser bilingüe, que no es nada extraño con otros idiomas, no tiene porqué ser distinto con la LSE.

2. Las canciones no aportan nada, no las pueden escuchar. Los beneficios de las canciones no sólo radican en su contenido armónico sonoro o vibratorio; las canciones ayudan al ritmo, a la diversión..., pero sobre todo facilitan la relación con otras personas, facilitan la interacción y la integración. Algunas recomendaciones para usar la música como estímulo:

a. Fomentar la expresividad acompañando la letra de la canción, ya sea en lenguaje oral o en lengua de signos.

b. Utilizar la mímica de los gestos que muchas canciones infantiles llevan asociadas; cuando se interactúa con menores, ayuda a focalizar la atención y a través de los gestos, sentirá el ritmo de la música, y poco a poco tenderá a imitarlos.

c. Bailar es una forma de fortalecer los lazos con la persona sorda. d. Se puede cantar con el fin de que detecte las vibraciones y reconozca mejor el movimiento de los labios.

3. La lectura labial es universal. Adquirir una comunicación únicamente mediante el reconocimiento de la LO a partir de la "lectura de los labios" es una herramienta que no todos pueden llegar a conseguir. De hecho, algunos estudios demuestran que incluso las personas que leen bien los labios, reconocen aproximadamente entre el 30-35% de las palabras. Algunas afirmaciones sobre la lectura labial:

a. Hay sonidos que no se pueden descifran mediante la lectura de labios. Por ejemplo, la g y
la j en palabras como guisante, jaleo, o el sonido C en palabras como cosa, cola, casa...

b. La similitud de muchos sonidos en la lectura de labios. Por ejemplo las letras (m, b y p)
(n, t y d) y (i y e), aunque suenan distinto, se "ven" de forma muy similar lo que puede llevar a confusión, por ejemplo, poca-boca.

c. El contexto marca el significado de algunas palabras, cuando el nivel de comunicación es más avanzado, la persona sorda podrá por el contexto intuir algunos significado.

d. A mayor conocimiento de la LO mejor reconocimiento labial. A medida que se vaya entrenando en la lectura labial se reconocerán más palabras, ya que una palabra o frase nueva, si no se conoce no se puede reconocer.

e. La lectura de labios no es lo mismo que la LO. De esta forma, aunque no se esté muy entrenado en el reconocimiento labial, si se puede pronunciar bien el LO. No obstante, esto es más tarea del logopeda.

f. Con audífono o con implante es igualmente beneficioso el entrenamiento en la lectura de labios, ya que en ambientes ruidosos, en piscina, playa... será una herramienta de gran utilidad. una en frente de otra, cuando se está en reunión, en un patio... es mucho más costosa.

g. La lectura de labios es más sencilla cuando la comunicación se realiza entre dos personas

4. Hablar "indio" hace que se entienda mejor el mensaje, es mejor hacer frases cortas, bien vocalizadas y expresadas y asegurarse de que se ha entendido bien.