Esta semana estamos dando continuidad al tema de la semana pasada, pero en esta ocasión de una forma más enfocada. Lo que buscamos en esta meditación es poder reconocer y traer a la luz esas cosas a las que nos aferramos y que de alguna forma nos afectan o limitan.

Muchas veces tenemos miedo de soltar porque el simple hecho de soltar trae un dolor o un sentido de pérdida, pero no alcanzamos a ver que a largo plazo el daño de seguir aferrados a esas cosas es más grande que el dolor temporal de soltar.

Nos aferramos a muchas cosas, entre ellas personas (relaciones), situaciones, experiencias, cosas u objetos, pensamientos, creencias o comportamientos. Al mantenernos anclados a eso, que puede ser del pasado, del presente o incluso del futuro, nos estamos cerrando puertas, estamos perdiéndonos de la oportunidad de transformar nuestra vida.

Hay muchas cosas que si tenemos el valor de soltar y enfrentar ese dolor temporal, podrían llevarnos a un mayor sentido de paz, armonía, bienestar e incluso mayor capacidad de ir hacia donde realmente deseas.

Definitivamente no terminarás de soltar con esta meditación, pero es una oportunidad de darte cuenta de cosas que no te están haciendo bien y en las que puedes trabajar. A través de esta meditación traemos a la luz lo que en el día a día no vemos.

Te sugerimos encontrar un espacio en tu rutina para realizar esta meditación durante toda la semana.
¡Que la disfrutes!

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