En el 2007 mientras estaba planeando mi primer viaje a Europa con dos amigas mías mexicanas, descubrí que existía una red para ser hospedado gratuitamente por gente en todo el mundo. "Te tratan muy bien sobre todo si eres mujer" me dijo el amigo quien me habló de esto. Alcé un poco la ceja por ese comentario, pero después de consultarlo con mis amigas, decidimos intentarlo para además ahorrarnos dinero. Efectivamente nos trataron de lujo y me quedé con ganas de hacerlo de nuevo e incluso de comenzar yo a hospedar a viajeros. Fue así como comencé a surfear por todo el mundo los sillones, el piso y las camas de gente que no conocía. Si estás pensando que fue por eso que me fue muy fácil visitar tantos países, no te equivocas, ¡pero tampoco pienses mal!. Gracias a este sitio de Couchsurfing conocí a gente maravillosa, hice amistades muy valiosas que aún conservo hasta el día de hoy y visité lugares a los que yo sola como turista, no hubiera podido llegar.
En este podcast en español voy a platicarles de mis mejores y mis peores experiencias en Couchsurfing, afortunadamente las positivas superaron por mucho las negativas. Hospedé a más de 30 personas en México, Italia y Portugal, me hospedaron en más de 10 países incluyendo: India, Turquía, España, Italia, Inglaterra, Portugal, España, Francia, Grecia, Marruecos, Bélgica e incluso mi propio país, México. Fui hospedada con amigos, con exnovios, sola e incluso con mi mamá, que es toda una chava de onda.
Entre las experiencias no tan padres que me tocó vivir con Couchsurfing están el hospedar en Veracruz a un suizo que al parecer no se bañaba o nunca lavaba su ropa, pues su sudor olía a tres metros de distancia; o la vez que el chico que me hospedó en Milán me ofreció un "inocente" masaje para después invitarme a quitarme la ropa. Extrañamente solo me quito la ropa cuando yo estoy pagando por un masaje!. O cuando en Marruecos (en donde viajé sola) me fugué a un hostal pues no quería quedarme en la casa de un chico que vendía hashís y tenía el estómago lleno de cortadas de navaja. No te pierdas de todas estas historias en este podcast, donde además les doy consejos de como unirse a este sitio y como usarlo.
Ya no soy tan activa en Couchsurfing, aún tengo un perfil abierto, pues no descarto la posibilidad de algún día volver a utilizar esta red con la que viví cosas que nunca me hubiera podido imaginar como tomar leche recién ordeñada en India, tomar tequilas con marineros en Grecia, hacerme novia de un italiano, y parrandear por el carnaval de Veracruz con 4 belgas ¡bien belgas!.

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