Escuchar "Jueves de la Primera Semana de Cuaresma, Lecturas Bíblicas"
Síntesis del Episodio
• Est 14, 1. 3-5. 12-14. No tengo otro auxilio fuera de ti, Señor.
• Sal 137. Cuando te invoqué, me escuchaste, Señor.
• Mt 7, 7-12. Quien pide recibe.
Pasamos una buena parte de nuestra vida pidiendo cosas a otras personas que tienen más, o que tienen unos conocimientos superiores a los nuestros. Pedimos, porque somos gente necesitada. Y es, en muchas ocasiones, la única posibilidad de relacionarnos con los demás. Si no pidiéramos nunca nada, terminaríamos en una especie de vacío y de falsa y empobrecida autosuficiencia. Pedir y dar; eso es la mayor parte de nuestra vida y de nuestro ser. Al pedir nos reconocemos necesitados. Al dar podemos ser conscientes de la riqueza sin término que Dios ha puesto en nuestro corazón.
Lo mismo nos ocurre con Dios. Gran parte de nuestras relaciones con Él están definidas por la petición; el resto, por el agradecimiento. Al pedir nos manifestamos en nuestra radical insuficiencia. Pedir nos hace humildes; además, damos a nuestro Dios la oportunidad de mostrarse como Padre. Conocemos así el amor que Dios nos tiene. Pues, ¿quién hay entre vosotros a quien si el hijo le pide pan le dé una piedra?,... ¿Cuánto más vuestro Padre que está en los Cielos dará cosas buenas a quienes le pidan?...
• Sal 137. Cuando te invoqué, me escuchaste, Señor.
• Mt 7, 7-12. Quien pide recibe.
Pasamos una buena parte de nuestra vida pidiendo cosas a otras personas que tienen más, o que tienen unos conocimientos superiores a los nuestros. Pedimos, porque somos gente necesitada. Y es, en muchas ocasiones, la única posibilidad de relacionarnos con los demás. Si no pidiéramos nunca nada, terminaríamos en una especie de vacío y de falsa y empobrecida autosuficiencia. Pedir y dar; eso es la mayor parte de nuestra vida y de nuestro ser. Al pedir nos reconocemos necesitados. Al dar podemos ser conscientes de la riqueza sin término que Dios ha puesto en nuestro corazón.
Lo mismo nos ocurre con Dios. Gran parte de nuestras relaciones con Él están definidas por la petición; el resto, por el agradecimiento. Al pedir nos manifestamos en nuestra radical insuficiencia. Pedir nos hace humildes; además, damos a nuestro Dios la oportunidad de mostrarse como Padre. Conocemos así el amor que Dios nos tiene. Pues, ¿quién hay entre vosotros a quien si el hijo le pide pan le dé una piedra?,... ¿Cuánto más vuestro Padre que está en los Cielos dará cosas buenas a quienes le pidan?...
ZARZA Somos ZARZA, la firma de prestigio que esta detras de los grandes proyectos en tecnología de la información.