alguna vez te has puesto a pensar sobre el valor del silencio, lo saludable que es en medio de una discusión, lo provechoso que es para esa persona que se está desahogando contigo, lo justo que es cuando se trata de no hablar mal de alguien, lo revelador que puede ser a la hora de crear una conexión con uno mismo y lo importante que es para aprender.Durante la Segunda Guerra Mundial se popularizó aún más el acto solemne de brindar un minuto de silencio en honor y respeto a los soldados caídos en batalla, con el objetivo de reflexionar. A veces, solo cuando logramos callar nuestra mente, cuando logramos apagar todas las voces que nos hablan, que nos preocupan, que promueven el estrés, es cuando logramos tomar el hilo de la paz mental, un estado de calma que nos permitirá pensar mejor gracias al silencio que hemos adquirido.Pero ¿qué hacemos con ese silencio? Este es el momento en que aprendemos a usarlo, porque nos permite entender sus tiempos. El silencio nos da la sabiduría de pensar antes de hablar, nos cuida de juzgar rápidamente, nos detiene cuando es la ira la que gobierna el momento, nos protege de prometer algo que posiblemente no podamos cumplir y hasta valoriza nuestra imagen al no permitirnos hablar más de la cuenta cuando no se debe, entre otros muchos beneficios más.Hoy te invito a guardar silencio y a escuchar más, a observar en medio del caos, del bullicio del lugar donde te encuentras y busca la posibilidad de compartir este regalo con alguien. Que hoy no sean tus palabras, sino tus actos los que hablen por ti, que tu silencio sea una semilla que germine y nutra todas las áreas de tu vida.

Ver todos los episodios