Escuchar "Despiértame, Señor"
Síntesis del Episodio
Canción: “Despiértame, Señor”
Una canción para abrir los ojos… y el corazón.
“Despiértame, Señor” nace del evangelio del primer domingo de adviento, donde Jesús nos invita a vivir despiertos, atentos, en vela, sin dejar que la vida nos pase por encima.
Es una llamada a levantarnos por dentro, a mirar alrededor con hondura, a descubrir las necesidades de los demás… y ser un regalo para el mundo.
Porque el amor verdadero no se improvisa: se despierta, se vigila, se cuida.
Esta canción quiere acompañarte ahí: cuando te falta fuerza,
cuando sientes que caminas a oscuras,
cuando intuyes que Dios pasa…
y no quieres dejarle pasar de largo.
Una melodía que habla de despertar la fe.
De abrir los ojos a lo que importa.
De vivir con el alma encendida.
“Despiértame, Señor… que quiero verte.”
Ojalá también te ayude a velar, a amar, a vivir con más luz.
#DespiértameSeñor; #AbreMisOjos; #EnciéndemeSeñor; #EnardeceMiCorazón; #Adviento2025;
© Miguel Ángel Morán Manzano - Todos los derechos reservados. Este contenido está registrado bajo un código de copyright, no se permite su redistribución sin autorización.
LETRA: “Despiértame, Señor”
(Canción inspirada en Mt 24,37-44)
Hay días que paso sin darme cuenta,
con pasos cansados, mirando al suelo.
Y el mundo a mi lado, gritando historias,
pero voy dormido dentro del tiempo.
Tú vienes despacio, sin hacer ruido,
tocando la puerta de lo que soy.
Y yo sin saberlo, vivo perdido…
despiértame el alma, despiértame, Dios.
Despiértame, Señor, que quiero verte feliz,
abre mis ojos rotos de esperar.
Pon en mi vida un fuego que despierte,
que esté en vela, listo para amar.
Hoy quiero ser regalo para el mundo,
ser luz que mira y deja de ignorar.
Despiértame, Señor, que estás llegando,
y no te quiero dejar pasar.
Dos hombres trabajan en el desierto,
dos mujeres sueñan junto al molino.
Y tú te presentas sin avisarnos,
como un amigo que llega del camino.
No quieres asustar, quieres abrirnos,
mostrar que la vida es más que correr.
Que el hoy se nos pasa… y si no miro,
la gloria del Reino puedo perder.
Despiértame, Señor, que quiero verte feliz,
abre mis ojos rotos de esperar.
Pon en mi vida un fuego que despierte,
que esté en vela, listo para amar.
Hoy quiero ser regalo para el mundo,
ser luz que mira y deja de ignorar.
Despiértame, Señor, que estás llegando,
y no te quiero dejar pasar.
Despertar…
es mirar al que tengo al lado.
Es escuchar el suspiro del otro.
Es vivir con hondura,
sin miedo, sin prisas…
con el alma encendida.
Despiértame, Señor, que quiero verte feliz,
abre mis ojos rotos de esperar.
Pon en mi vida un fuego que despierte,
que esté en vela, listo para amar.
Hazme vigilia, mano extendida,
mirada limpia para caminar.
Despiértame, Señor, que estás llegando,
y sí te quiero.
Una canción para abrir los ojos… y el corazón.
“Despiértame, Señor” nace del evangelio del primer domingo de adviento, donde Jesús nos invita a vivir despiertos, atentos, en vela, sin dejar que la vida nos pase por encima.
Es una llamada a levantarnos por dentro, a mirar alrededor con hondura, a descubrir las necesidades de los demás… y ser un regalo para el mundo.
Porque el amor verdadero no se improvisa: se despierta, se vigila, se cuida.
Esta canción quiere acompañarte ahí: cuando te falta fuerza,
cuando sientes que caminas a oscuras,
cuando intuyes que Dios pasa…
y no quieres dejarle pasar de largo.
Una melodía que habla de despertar la fe.
De abrir los ojos a lo que importa.
De vivir con el alma encendida.
“Despiértame, Señor… que quiero verte.”
Ojalá también te ayude a velar, a amar, a vivir con más luz.
#DespiértameSeñor; #AbreMisOjos; #EnciéndemeSeñor; #EnardeceMiCorazón; #Adviento2025;
© Miguel Ángel Morán Manzano - Todos los derechos reservados. Este contenido está registrado bajo un código de copyright, no se permite su redistribución sin autorización.
LETRA: “Despiértame, Señor”
(Canción inspirada en Mt 24,37-44)
Hay días que paso sin darme cuenta,
con pasos cansados, mirando al suelo.
Y el mundo a mi lado, gritando historias,
pero voy dormido dentro del tiempo.
Tú vienes despacio, sin hacer ruido,
tocando la puerta de lo que soy.
Y yo sin saberlo, vivo perdido…
despiértame el alma, despiértame, Dios.
Despiértame, Señor, que quiero verte feliz,
abre mis ojos rotos de esperar.
Pon en mi vida un fuego que despierte,
que esté en vela, listo para amar.
Hoy quiero ser regalo para el mundo,
ser luz que mira y deja de ignorar.
Despiértame, Señor, que estás llegando,
y no te quiero dejar pasar.
Dos hombres trabajan en el desierto,
dos mujeres sueñan junto al molino.
Y tú te presentas sin avisarnos,
como un amigo que llega del camino.
No quieres asustar, quieres abrirnos,
mostrar que la vida es más que correr.
Que el hoy se nos pasa… y si no miro,
la gloria del Reino puedo perder.
Despiértame, Señor, que quiero verte feliz,
abre mis ojos rotos de esperar.
Pon en mi vida un fuego que despierte,
que esté en vela, listo para amar.
Hoy quiero ser regalo para el mundo,
ser luz que mira y deja de ignorar.
Despiértame, Señor, que estás llegando,
y no te quiero dejar pasar.
Despertar…
es mirar al que tengo al lado.
Es escuchar el suspiro del otro.
Es vivir con hondura,
sin miedo, sin prisas…
con el alma encendida.
Despiértame, Señor, que quiero verte feliz,
abre mis ojos rotos de esperar.
Pon en mi vida un fuego que despierte,
que esté en vela, listo para amar.
Hazme vigilia, mano extendida,
mirada limpia para caminar.
Despiértame, Señor, que estás llegando,
y sí te quiero.
Más episodios del podcast Vibra con fe
Hazme tierra nueva
06/12/2025
Acuérdate de mi
22/11/2025
Luz al final
15/11/2025
Limpia mi corazón
07/11/2025
María, Mujer de Esperanza
28/10/2025
Mírame, Señor
24/10/2025
Gracias por tu amor
10/10/2025
ZARZA Somos ZARZA, la firma de prestigio que esta detras de los grandes proyectos en tecnología de la información.