Síntesis del Episodio "Octavo Día "
«Mis queridos hijos: no me abandonen, Yo anhelo acogerlos a todos en el calor de mis brazos; permanezcan fuertes en unidad. Satanás no puede causar daño cuando permanecemos todos unidos con mi Jesús como nuestro centro. Les digo: vengo a llamarlos hacia una convicción, la convicción de la consagración global; vendré a recoger las cosechas de esta consagración unificada, mi corte. En la consagración a mi Inmaculado Corazón ustedes darán su «SI» para ser escogidos y colocados a su servicio de un modo especial; ustedes están aceptando los sacrificios del triunfo, porque yo le pediré mucho a cada uno. Humillen sus almas y tomen mi mano, permítanme conducirlos a la paz; la paz de sus familias, la paz de sus países nativos y la paz en el mundo.