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Escuchar "Cómo Vencer la Postergación - Roberto Nova. Escritor|Conferencista|Coach #RobertoNovaBL"
Síntesis del Episodio
El hábito de postergar o de dejar para después es una problemática que nos afecta a todos en diversas áreas de nuestra a vida. A diario decidimos posponer las cosas que realmente son importantes hacer, y optamos por aquellas que nos dan satisfacción inmediata, aun no sean tan prioritarias.
Es importante entender que, más que racionales, somos seres emocionales. Por ejemplo, sabemos que es importante hacer ejercicio todos los días y mantener una dieta saludable para poder estar en forma y en salud, pero como es más atractiva la comida chatarra, y descansar o divertirse, optamos por los que nos proporciona una emoción más positiva en ese momento.
Las principales causas de la postergación son la pereza, la desgana, el miedo y el hecho de que nos dejamos afectar por problemas externos, y permitimos que nuestro estado anímico determine nuestras acciones.
Algunas soluciones para dejar de postergar son:
1. Elegir una de todas tus metas, definirla claramente, enfocarte en ella, y decidir buscar la gratificación diferida, en vez de la inmediata.
2. Encontrar detonadores emocionales. Éstos son recursos en distintos formatos como texto, audio y video, que te ayudan a recordar hacia donde vas y restaurar el entusiasmo que te hace falta para poner acción en ese momento.
3. Evitar distracciones y desorden. Busca ambientes que te permitan enfocarte en una cosa a le vez y no distraerte con otras cosas mientras lo haces. El desorden en tu oficina o en tu casa te roba energía mental que puede ser utilizada para dar el paso y poner acción.
4. Mantén una vida saludable. Buena dieta y ejercicio diario te aumentarán considerablemente la energía física y mental que necesitas para aumentar tu fuerza de voluntad y actuar hoy.
5. Comienza de inmediato. Mientras más lo pienses, más difícil será. Mientras más lo pospongas más poder le estás dando sobre ti, y sobre tu estado de ánimo. Lánzate a hacer lo que tienes que hacer sin darle vueltas.
6. Agenda y comprométete. Determina un objetivo diario que has estado posponiendo, y comprométete a completarlo en esa jornada antes de acostarte.
7. Crea nuevos hábitos. Costumbres que aumenten tu energía y tu fuerza de voluntad. Procura cambiar poco a poco los hábitos que te restan, por aquellos que te suman, y ten preparado con antelación las cosas que debes hacer cada día de la semana.
Es importante entender que, más que racionales, somos seres emocionales. Por ejemplo, sabemos que es importante hacer ejercicio todos los días y mantener una dieta saludable para poder estar en forma y en salud, pero como es más atractiva la comida chatarra, y descansar o divertirse, optamos por los que nos proporciona una emoción más positiva en ese momento.
Las principales causas de la postergación son la pereza, la desgana, el miedo y el hecho de que nos dejamos afectar por problemas externos, y permitimos que nuestro estado anímico determine nuestras acciones.
Algunas soluciones para dejar de postergar son:
1. Elegir una de todas tus metas, definirla claramente, enfocarte en ella, y decidir buscar la gratificación diferida, en vez de la inmediata.
2. Encontrar detonadores emocionales. Éstos son recursos en distintos formatos como texto, audio y video, que te ayudan a recordar hacia donde vas y restaurar el entusiasmo que te hace falta para poner acción en ese momento.
3. Evitar distracciones y desorden. Busca ambientes que te permitan enfocarte en una cosa a le vez y no distraerte con otras cosas mientras lo haces. El desorden en tu oficina o en tu casa te roba energía mental que puede ser utilizada para dar el paso y poner acción.
4. Mantén una vida saludable. Buena dieta y ejercicio diario te aumentarán considerablemente la energía física y mental que necesitas para aumentar tu fuerza de voluntad y actuar hoy.
5. Comienza de inmediato. Mientras más lo pienses, más difícil será. Mientras más lo pospongas más poder le estás dando sobre ti, y sobre tu estado de ánimo. Lánzate a hacer lo que tienes que hacer sin darle vueltas.
6. Agenda y comprométete. Determina un objetivo diario que has estado posponiendo, y comprométete a completarlo en esa jornada antes de acostarte.
7. Crea nuevos hábitos. Costumbres que aumenten tu energía y tu fuerza de voluntad. Procura cambiar poco a poco los hábitos que te restan, por aquellos que te suman, y ten preparado con antelación las cosas que debes hacer cada día de la semana.