Durugutti es una bodega familiar que nace en el año 2002 por un sueño compartido de los hermanos y enólogos Héctor y Pablo Durigutti. Ubicada en Las Compuertas, corazón de Luján de Cuyo, Mendoza, la finca propia se encuentra en un corredor histórico del vino argentino, donde por primera vez se plantó la cepa insignia Malbec, con un inmenso valor patrimonial y vides centenarias aún en producción. Finca Victoria se encuentra en una posición privilegiada, a solo 30 minutos del aeropuerto y 20 minutos de la capital provincial, en medio de un oasis al pie de la Cordillera de los Andes para disfrutar de grandes vinos con identidad. Héctor y Pablo nacieron en el este de Mendoza, Rivadavia y crecieron felices en el entorno familiar, rodeados de la cultura local del vino. De jóvenes ambos estudiaron enología y luego de algunos años de experiencias personales y consultorías decidieron forjar un camino juntos. Desde entonces son un tándem que se complementan a la perfección, motivados por construir ese andar juntos, compartir sus historias, transmitir el amor por la tierra, interpretar el valor de cada terruño con sus miradas y reflejarlos de la manera más pura posible en los vinos que elaboran con identidad de origen. Curiosos, inquietos, exploradores, profesando una misma filosofía de vida que los ha llevado a descubrir nuevos horizontes dentro y fuera de Argentina, a rescatar el valor patrimonial y el carácter local, a volver a las raíces manteniendo viva la tradición con una visión de futuro, dispuestos a evolucionar para elaborar vinos diversos, de gran calidad, presentes en el mercado local y en el mundo.La primera bodega comparte casa con otro proyecto vitícola (Lamadrid Estate Wines) y es una construcción original tradicional del año 1959, recuperada y puesta en valor, que alberga la mayor parte de la producción. A pocos metros de allí se encuentra Finca Victoria, donde se construye la nueva bodega familiar exclusiva de los hermanos, de perfil boutique, como parte de un proyecto de vida sustentable, en armonía con el ecosistema local de vides centenarias. La bodega, integrada a la represa para promover la biodiversidad y aprovechamiento de los recursos hídricos, alberga especialmente los vinos que nacen de los viñedos propios. Se construye con piletas tradicionales de hormigón armado, con ánforas de cemento para elaborar vinos mayormente sin paso por madera, naturales, sin estabilizar, sin filtrar y sin clarificar. Tecnología y conocimiento puestos al servicio de una visión para elaborar vinos que sean la máxima expresión de cada terruño.

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