Luna nueva en Acuario. 9/1. Entramarse
Esta luna nos invita a la disrupción, al choque con lo repetido y cíclico que arrastramos, a la inauguración que requiere revelarse a lo establecido. Estallar, para que lo que nos aplasta retroceda, deje espacio.
La luna nueva en acuario nos permite habilitar más espacio en nuestra vida para las redes, los encuentros, las vincularidades que nos entraman y nos ligan con un universo social que es, de un modo u otro, sostén de la individualidad que somos. Nos recuerda que “yo soy” siempre parte de un colectivo, y que ese ser parte me permite ser yo. Nadie es suelto, aislado.
Esta luna nos dice que registrar la naturaleza colectiva de nuestra singularidad humana es tan necesario como entender que hay cosas que están más allá de la razón y la lógica. No somos solamente luz, ni somos números deambulando aislados. Somos polvo de estrellas, animado por el misterio; y nuestra existencia entera se sostiene en la existencia de otros y otras que han estado, que están ahí para nosotrxs, con nosotrxs.
La vida, las circunstancias, los acontecimientos, nos llevarán a replantearnos la forma de entender las cosas. Nuestros paradigmas, esas lentes con las que vemos el mundo, se romperán en estas épocas, y esta luna nueva nos permite aceptar esos quiebres y mirar con ojos nuevos lo que presenta el horizonte. 
Registrar el contexto nos da un marco y una guía.
En estos tiempos de tanta urgencia, de tantas emergencias, es vital recordarnos las preguntas más inútiles, volver a traer dudas profundas sobre la existencia. Quizás en estas preguntas recuperemos la capacidad de ligarnos con otrxs y transformar nuestras vidas. Esta luna nos recuerda que estos tiempos requieren pensar fuera de la caja, y desplegar la desesperada creatividad con la que la vida, ante la restricción, inventa un modo de seguir adelante.
Esta luna nos dice que el problema no es lo que se pierde, sino lo que se resigna. Aceptar la pérdida es parte de crecer y nos permite operar, hacer, construir, reinventar lo que nos hace falta. La resignación nos empantana, nos detiene en el tiempo.
Si perdemos un trabajo, la vida que late dentro demandará reinventarnos. Si en nuestro ser parte de un colectivo (trabajadorx, niñx, mujer) perdemos derechos, habrá que reinventarse, porque en la resignación anida el sometimiento.  
En el mundo social, las presiones del medio transforman a los individuos, los hacen cambiar, los moldean. El universo humano es mucho más plástico que el mundo natural, que simplemente elimina a los individuos menos adaptados. Esta luna nos invita a registrar qué transformaciones nos llevan a hacer las presiones sociales que recibimos, dónde es vital resistir y dónde es vital transformarse. 
Visualización
Un barco cargado de esclavos atraviesa el océano. Una mujer llora, una niña está a su lado. La niña le dice a su madre que tuvo una visión: estaban ellas dos y muchas personas de otras tribus viviendo en un lugar desconocido. La niña era grande y las dos tenían muchas cicatrices en la espalda, pero de nuevo eran libres.  

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