la helada del inviernoque tanto hemos temidoestá lejos muy lejos y el verdorduerme tranquiloRosario BlefariLa claridad mental nos permite nombrar lo que nos duele, darle una explicación, entenderlo, y de alguna forma desenterrar del silencio una espina que nos lastimó y que ahora se convierte en una espada en nuestras manos. Desobedecer y dejar de centrarnos en lo que creemos que tenemos que hacer, y así poder acercarnos a una pregunta central y sencilla ¿cómo quiero vivir mi vida?Por supuesto que del otro de los mandatos están las limitaciones de la realidad, pero la posibilidad de entender el mundo de otros modos nos permite encontrar la salida del laberinto en el que aprendimos a acomodarnos plácidamente. El movimiento es fuerte, casi incesantemente en estos días, y de alguna forma u otra toca todas las áreas de nuestra vida.Claro que no nos recomiendo encerrarnos a esperar que pase la tormenta sino detenernos a escuchar los truenos y a ver los rayos caer con la conciencia de que el agua traerá lo necesario para que la cosecha se produzca en algún momento del futuro. A veces, la actitud adecuada frente a lo doloroso es darnos espacio para que duela, sin apelar a una sabiduría trascendente que nos ubique más allá del dolor. Si alcanzar el zen podría describirse en términos de: “como cuando tengo hambre, duermo cuando tengo sueño”, entonces parte de la sabiduría es llorar cuando nos duele, y sonreir cuando somos felices. Festejar y celebrar, o duelar y apenarse, son modos de entrar en relación con la vida. Necesitamos darle espacio a los dos polos del espectro.Nuestro mundo emocional está dinamizado por una serie de tránsitos que revuelven nuestras vivencias y las memorias que nos definen. Liberarnos del peso de lo retenido es una promesa o una amenaza, depende de si nos detenemos a mirar lo que viene después, o lo difícil que puede ser el proceso.Esta semana terminamos de llegar a un punto de partida que promete alojar nuestros deseos y abrir un espacio de creatividad y vitalidad para lo que queremos construir concreta y materialmente en nuestra vida. Es prudente ubicar nuestros deseos y darles una tierra en la que puedan crecer.Tener más conciencia de lo que nos ha dolido, estar un poco más cerca de las propias heridas, nos permite dejar de repetir, retirar de un lugar central el padecimiento y abrir un espacio para que la creatividad y la vitalidad, a la que el presente nos convoca, asuma la forma que pueda en este momento de nuestra vida, en nuestro contexto.Tránsitos de esta semana16/9 Marte ♎ oposición Quirón ♈Venus ♌ trígono Quirón ♈17/9 Mercurio ♍ oposición Saturno ♓18/9 Mercurio entra en Libra ♎Mercurio ♎ oposición Neptuno ♈19/9 Venus entra en Virgo ♍20/9 Venus ♍ cuadratura Urano ♊21/9 Sol ♍ oposición Saturno ♓Eclipse parcial de Sol

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