Algunos hermanos designados por el prior (GP) pueden realizar labores de reclutamiento y entrevistas a los postulantes (candidatos). Lo que se medirá y constará en los archivos del priorato y en el expediente de cada uno, de acuerdo a sus resultados. Ser templario en este siglo es lealtad, entrega y compromiso con la Organización. Ayudar a su crecimiento y expansión. Contribuir en la propagación y divulgación de su existencia. Hablar con la gente, los amigos, etcétera. En vez de callarse y esconderse por pena y para que no los tilden o tachen de locos. Te llamarán loco los flojos y los ignorantes. Te juzgarán y te señalarán con el dedo como hicieron con Jesús. Y esta será la mayor prueba de fe y amor a Dios. Rechazando al mundo para Agradar a nuestro señor y no al mundo. Para salvar almas y traer a la Orden a quiénes han decidido seguirlo y los que son elegidos por Él. Para formar parte de su blanca hueste de Guerreros y Caballeros. Porque un templario debe saber que no Actúa sino para el bien de la humanidad y el prestigio de la Orden como institución fraternal que predica no solo una formación caballeresca sino la verdadera religión del amor. La que nos enseñó Jesús y que por sus enseñanzas nos consideramos Cristianos. Fieles a Cristo y al Temple. Nnobis... Templarios de Cuba [email protected]

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