Bereshit 18: 1 al 22: 24

Avraham en un sentido espiritual personifica la cualidad de jesed -bondad- que no sólo se refiere a las acciones benevolentes hacia las demás personas sino también a la capacidad de aceptar a HaKadosh BarujHu como la verdad absoluta y hacer su voluntad expresada en Torá y mitzvot. Por medio del rasgo de la hospitalidad Avraham logró que miles de personas se acercaran a HaShem. Los tres Malajim que visitan a Avraham después de la circuncisión cumplen con un doble propósito; visitar al enfermo (origen de la mitzvá de “bikur jolim”) y darle la oportunidad a Avraham de practicar su hospitalidad. Avraham es sometido por HaKadosh BarujHu a diez pruebas, pero la más dificil de todas ellas fue la de "Akeidat Itzjak", ofrecer a su hijo en sacrificio por petición de HaShem.

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