Nuestra meta suprema: agradar a Dios

03/01/2025 5 min Temporada 1 Episodio 1
Nuestra meta suprema: agradar a Dios

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Síntesis del Episodio

Gálatas 1:10 Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo. Es preferible estar bien con Dios, aunque estemos mal con los hombres, y no estar mal con Dios, y bien con los hombres. Esto es resumido en el pasaje que hoy estamos estudiando, la palabra nos recuerda que es preferible agradar a Dios, antes que a los hombres. Claramente el apóstol Pablo nos hace ver acá, que no podemos agradar a los hombres, antes que a Dios. Por ello hemos titulado el devocional de hoy, que nuestra meta suprema, sea agradar a Dios. Cuando ponemos en la balanza a quién conviene agradar, siempre ganará el agradar a Dios. No sé cuántas veces hemos nosotros decidido equivocadamente, agradar a los hombres antes que a Dios, eso ya lo hemos dicho, es una equivocación. Porque no importa cuánto trate usted de agradar a los hombres, siempre quedará defraudado, pero cuando usted trata de agradar a Dios, nunca terminará desilusionado, al contrario aunque todos estén desagradados, por su conducta queriendo agradar a Dios, usted será el mayor beneficiado. Estimado lector o escucha, analicemos cada vez que tengamos que comportarnos, y evaluemos a quién estamos agradando primero, si a Dios o a los hombres. Qué importante es que nosotros podamos estar, con nuestra conducta de vida, agradando a Dios, sin estar mirando cuánto queremos agradar a los hombres. Muchas veces caemos en el error, y por no ofender a las personas, ofendemos a Dios. Un ejemplo muy común es; Cuando tenemos que mentir para no ofender a las personas, pero con esa mentira estamos ofendiendo a Dios, cuando tenemos que dejar de decir algo, que Dios declara que debe o no debe hacerse, pero por temor a ofender a las personas que están presentes, no lo decimos, esto por querer agradar a las personas, antes que a Dios. Podríamos seguir ejemplificando cuántas veces nosotros nos hemos visto en situaciones, a donde tenemos que decidir si agradamos a Dios, o a los hombres. Lamentablemente en muchas ocasiones, hemos tomado la decisión equivocada, agradar a los hombres, antes que a Dios. En este nuevo comienzo de año, nosotros podamos también plantearnos esta meta o este propósito de vida, que nuestra meta suprema sea siempre, agradar a Dios sin importar lo que las personas piensen de nosotros. Porque nuestra mayor meta siempre sea, agradar a Dios. No sé cuántas metas usted se haya planteado en este inicio de año, pero que hoy usted pueda incluir o agregar esta meta, a su plan de vida para este año, agradar a Dios, antes que agradarme a mí mismo, o a los demás. Estimado lector o escucha, no sé cuántas veces en nuestra vida nos ha tocado tener que decidir, por agradar a los hombres, o a Dios, pero que de ahora en adelante, cada decisión de esta manera, la hagamos de forma correcta, y podamos agradar a Dios, antes que a los hombres. Hoy es un buen día para iniciar con este propósito, y no importa cuántos se molesten, porque preferimos agradar a Dios, antes que a los hombres. Así que hoy usted puede iniciar, con esta meta suprema en su vida; Agradar a Dios, antes que a los hombres. Que Dios les bendiga amados hermanos. Pastores Marroquín