Dios Y Yo Salmos 119:11 En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti. Que el anhelo de nuestro corazón sea no pecar contra Dios. El salmista lo dice de manera maravillosa en este hermoso pasaje, en mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti. El deseo del escritor era no pecar contra Dios, y la fórmula que él había encontrado, era guardar la palabra de Dios, guardar los dichos de Dios, traducido ahora en nuestro tiempo sería, que nosotros vamos a observar los principios, y lineamientos bíblicos, para no fallarle a nuestro Dios. Estamos en un mundo repleto de pecado, de iniquidad, y pareciera imposible no contaminarnos con todo esto, que el mundo ahora mismo es. Pero déjeme recordarle que la fórmula sigue siendo la misma, que el salmista nos receta en este pasaje, en mi corazón he guardado tus dichos. Guardar en nuestro corazón la palabra de Dios, garantiza nuestra fidelidad a Dios, no importa bajo qué asedio del pecado usted se encuentre, déjeme decirle que saldrá victorioso, ante cualquier batalla del enemigo, si usted decide guardar la palabra de Dios en su corazón. Este pasaje de hecho, se encuentra en el salmo más grande que existe en la Biblia, es el salmo 119, y el salmo 119 podemos declararlo, como un poema a la Biblia, en el encontramos todo lo que nosotros queremos saber, de la palabra de Dios. Podemos encontrar cómo guardarla, los beneficios que obtenemos al guardar su palabra, y muchas otras cosas más, que tienen que ver con la palabra de Dios. Estimado lector o escucha, si usted se considera una persona que a menudo está fallándole, o pecando contra Dios, una de las razones es porque no está guardando la palabra de Dios, en su corazón, no está practicando la palabra de Dios, en su diario vivir, y esa es la única y exclusiva razón, por la cual usted no puede dejar de pecar, contra Dios. Pero si usted decide hoy guardar, la palabra de Dios en su corazón, yo puedo asegurarle que usted podrá vivir una vida, no alejada de este mundo, no imposibilitado para pecar, pero sí le puedo asegurar algo, usted tendrá a la mano, una herramienta tan poderosa, como es la palabra de Dios, que cuando usted se encuentre en medio de cualquier ataque del pecado, para su vida, usted podrá salir vencedor. Porque la palabra nos lo dice, que ella nos guarda, nos protege, nos guía, nos instruye. Es importante reconocer, que la palabra de Dios practicándola, nos alejará del pecado. Estimado lector o escucha, hoy es un buen día para que usted, comience con la lectura de la palabra de Dios, pero no solamente leyéndola, sino poniéndola en práctica, en cada actividad que Dios nos permita realizar, durante el día. Por eso hoy decidamos guardar su palabra, para no pecar contra Dios. Que Dios les bendiga amados hermanos. Pastores Marroquín

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