Entrega racional y completa a Dios

05/05/2025 3 min Temporada 4 Episodio 30
Entrega racional y completa a Dios

Escuchar "Entrega racional y completa a Dios"

Síntesis del Episodio

Dios y Yo Romanos 12:1 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. La consagración es la manera de darnos por completo a Dios. Algunas veces pensamos que podemos tratar a medias con Dios, de tal manera que hay una parte de nosotros que decidimos que es de Dios, y otra parte que nosotros manejamos a nuestro antojo. Eso no es así. El texto de hoy nos dice de manera específica cuál debe ser la forma en que debemos entregarnos a Dios. Y nos dice que debe ser de manera completa y de manera racional. La palabra “racional” viene del raciocinio que nosotros, los humanos, tenemos: la capacidad de razonar, de hacerlo conscientemente, de saber que lo que estamos haciendo es para agradar a Dios. Por ello, al final, este versículo termina diciendo que ese debe ser nuestro culto racional, o sea, la manera consciente y voluntaria de darnos completamente a Dios. Estimado lector o escucha, yo no sé cuánto sea usted consciente de la manera en que se está dando a Dios. Dios no aceptará menos que el 100% de nosotros. Por lo tanto, debemos ser conscientes de que nuestra entrega a Dios debe ser completa. Estimado lector o escucha, de usted depende cuán comprometido quiere estar con Dios. Él no quiere menos que todo de nosotros. Por eso la Palabra hoy nos dice cómo debemos entregarle todo a nuestro Dios. Existe un ruego del apóstol Pablo hacia nosotros, y un recordatorio a la vez. El ruego es en base a la entrega que nosotros deberíamos estarle haciendo a Dios, y la razón es la bondad de Dios hacia nosotros: “Os ruego por sus misericordias”. Recordemos cuán bueno ha sido Dios con nosotros, y luego actuemos: que presentemos nuestros cuerpos. Esto da a entender el sacrificio que era hecho en la antigüedad, denominado el sacrificio de consagración, o la ofrenda de consagración. Esto significaba que el cordero debía ser quemado por completo en el altar. Esto es lo que nos está pidiendo el apóstol Pablo: que entreguemos nuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo y agradable a Dios, de manera racional, conscientes de lo que estamos haciendo. De cada uno de nosotros depende cuán comprometidos queremos estar con Dios. Y como ya lo hemos dicho al principio: Dios no aceptará menos que todo de nosotros. Así que, querido hermano o amigo, el compromiso con Dios debe ser completo. No a medias, ni casi todo. Es todo o nada. Porque nuestra adoración debe ser agradable a Dios, y nuestra entrega debe ser total. Hoy puede ser el primer día del resto de nuestra vida, en que todos los días hagamos una entrega racional y completa al Señor. Que Dios les bendiga, amados hermanos. Pastores Marroquín