De niño tenía mucho miedo a morir. Con el tiempo fui “superándolo”, pero ahora de adulto, me di cuenta que a lo que realmente le tengo miedo es a morir y que nadie se acuerde de mi. Morir sin trascender. Sin dejar en legado. En estos años hemos acumulado muchísima experiencia penetrando en el mercado americano, y cuando más de uno te dice: “oye, tienes un conocimiento muy importante que nosotros no”, pareciera se vuelve una responsabilidad divina el compartirlo. Con el tiempo poco a poco descubrí que más que el éxito económico, mi verdadera pasión es realizar ventas que ayuden a crecer a las empresas latinoamericanas.

Ver todos los episodios