Escuchar "Lunes, 30 de agosto de 2021"
Síntesis del Episodio
En aquel tiempo, fue Jesús a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el Libro del Profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito:
«El Espíritu del Señor está sobre mí,
porque él me ha ungido.
Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres,
para anunciar a los cautivos la libertad,
y a los ciegos, la vista.
Para dar libertad a los oprimidos;
para anunciar el año de gracia del Señor».
Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y él se puso a decirles:
-Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír.
Y todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia que salían de sus labios.
Y decían:
-¿No es éste el hijo de José?
Y Jesús les dijo:
-Sin duda me recitaréis aquel refrán: «Médico, cúrate a ti mismo»: haz también aquí en tu tierra lo que hemos oído que has hecho en Cafarnaún.
Y añadió:
Os aseguro que ningún profeta es bien mirado en su tierra. Os garantizo que en Israel había muchas viudas en tiempos de Elías, cuando estuvo cerrado el cielo tres años y seis meses y hubo una gran hambre en todo el país; sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías más que a una viuda de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del Profeta Eliseo, sin embargo, ninguno de ellos fue curado más que Naamán, el sirio.
Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte en donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo.
Pero Jesús se abrió paso entre ellos y se alejaba.
Ungidos
Buenos días Jesús,
Esto si que no me lo creo.
Ungido.
"Él me ha ungido"
Estas palabras que hoy resuenan con fuerza en tu Evangelio me cuestionan un día más.
Me cuestionan por todo lo que supone asumir tus palabras.
Me cuestiona porque, igual que tus conciudadanos, mi mirada sobre la realidad es muy pobre.
Cuántos agobios...
Cuántos problemas sin solución...
Cuánto relleno vacío....
Cuánto tiempo perdido...
Sencillamente esto, vivir como ungidos.
Vivir a la luz del Ungido.
Vivir siendo conscientes de que tu Espíritu se desborda una y otra vez a lo largo de mis días colmándolos con tus guiños.
Vivir desde ti anunciando la verdadera libertad.
Vivir para ti mirando el mundo con la mirada propia del ungido; la del niño que no cabe en su asombro por las cosas que descubre a su alrededor.
Vivir, mirar, bailar, reir, abrazar, llorar, saltar, estudiar, trabajar, limpiar, perdonar... hacerlo todo como ungidos que somos.
Que nos lo grabemos a fuego: ungidos.
Todo lo demás es relativo. Que todo lo demás se viva desde esta conciencia: hemos sido ungidos.
Gracias porque no he hecho nada y me lo has dado todo.
Gracias porque te derramas sobre mi pequeñez.
Gracias porque la fuerza de la unción no depende de mis fuerzas sino de tu sobreabundancia.
Lo eres todo. Gracias.
«El Espíritu del Señor está sobre mí,
porque él me ha ungido.
Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres,
para anunciar a los cautivos la libertad,
y a los ciegos, la vista.
Para dar libertad a los oprimidos;
para anunciar el año de gracia del Señor».
Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y él se puso a decirles:
-Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír.
Y todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia que salían de sus labios.
Y decían:
-¿No es éste el hijo de José?
Y Jesús les dijo:
-Sin duda me recitaréis aquel refrán: «Médico, cúrate a ti mismo»: haz también aquí en tu tierra lo que hemos oído que has hecho en Cafarnaún.
Y añadió:
Os aseguro que ningún profeta es bien mirado en su tierra. Os garantizo que en Israel había muchas viudas en tiempos de Elías, cuando estuvo cerrado el cielo tres años y seis meses y hubo una gran hambre en todo el país; sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías más que a una viuda de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del Profeta Eliseo, sin embargo, ninguno de ellos fue curado más que Naamán, el sirio.
Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte en donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo.
Pero Jesús se abrió paso entre ellos y se alejaba.
Ungidos
Buenos días Jesús,
Esto si que no me lo creo.
Ungido.
"Él me ha ungido"
Estas palabras que hoy resuenan con fuerza en tu Evangelio me cuestionan un día más.
Me cuestionan por todo lo que supone asumir tus palabras.
Me cuestiona porque, igual que tus conciudadanos, mi mirada sobre la realidad es muy pobre.
Cuántos agobios...
Cuántos problemas sin solución...
Cuánto relleno vacío....
Cuánto tiempo perdido...
Sencillamente esto, vivir como ungidos.
Vivir a la luz del Ungido.
Vivir siendo conscientes de que tu Espíritu se desborda una y otra vez a lo largo de mis días colmándolos con tus guiños.
Vivir desde ti anunciando la verdadera libertad.
Vivir para ti mirando el mundo con la mirada propia del ungido; la del niño que no cabe en su asombro por las cosas que descubre a su alrededor.
Vivir, mirar, bailar, reir, abrazar, llorar, saltar, estudiar, trabajar, limpiar, perdonar... hacerlo todo como ungidos que somos.
Que nos lo grabemos a fuego: ungidos.
Todo lo demás es relativo. Que todo lo demás se viva desde esta conciencia: hemos sido ungidos.
Gracias porque no he hecho nada y me lo has dado todo.
Gracias porque te derramas sobre mi pequeñez.
Gracias porque la fuerza de la unción no depende de mis fuerzas sino de tu sobreabundancia.
Lo eres todo. Gracias.
Más episodios del podcast Voces en On | HAKUNA
Martes, 7 de agosto de 2024
09/08/2024
Lunes, 5 de agosto de 2024
09/08/2024
Domingo, 4 de agosto de 2024
04/08/2024
Sábado, 3 de agosto de 2024
03/08/2024
Viernes, 2 de agosto de 2024
02/08/2024
Jueves, 1 de agosto de 2024
01/08/2024
Miércoles, 31 de julio de 2024
31/07/2024
Martes, 30 de julio de 2024
31/07/2024
Lunes, 29 de julio de 2024
29/07/2024
Domingo, 28 de julio de 2024
29/07/2024