Esta es desapegarte de las emociones causadas por cuestiones insignificantes en tu vida. Dudas, inseguridades, situaciones las cuales realmente son impermanentes, pues nada de lo que podemos ver es para siempre.

Y cuando tienes tanta claridad, y estás enfocado, inmediatamente tienes una línea directa hacia esta mente más profunda la cual llamamos nuestro real SER.

Recuerda pensar el esas situacioncillas que tarde o temprano dejaran de existir no es claridad mental. Eso es implicación personal y fortalece las redes en lo concreto de nuestras dudas, limitaciones y victimismos.

Cuando sales de la zona de conflicto uno está despejado y fuera del torrente emocional, podemos ver un problema en nuestro cuerpo desde el punto de vista del observador y solucionarlo. Milagroso. Porque, ves, no tienes que juzgarlo o calificarlo como problema, ves con claridad y te das cuenta que eso es impermanente y ya. Usas tu poder interior cambiando todo lo externo e irreal hasta tu verdadera realidad.

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