Escuchar "Cinco mil muchachas para un solo hombre"
Síntesis del Episodio
No fue una sola muchacha. Fueron cinco mil. Cinco mil muchachas que lo obsesionaron, que le robaron el sueño, que lo lanzaron en una carrera loca. Algunas eran rubias; otras eran morenas; otras, trigueñas; otras, pelirrojas. Unas vestían a la moderna; otras a la antigua. ¿Quiénes eran estas cinco mil muchachas? Eran muñecas, de las llamadas «Barbie», tesoro preciado de Glen Offield. Su afición era coleccionarlas. Pero Scott Sloggett las codició y las robó, después de lo cual incendió la casa de Glen Offield. Luego, horrorizado de su propio hecho, se suicidó tomando una sobredosis de drogas. Hay hombres que pierden la cabeza por una sola mujer, así como los hay que la pierden por muchas mujeres. Este hombre perdió la suya por una colección de cinco mil muñecas, una colección valorada en más de medio millón de dólares. La historia bíblica y secular está llena de amantes célebres: Sansón y Dalila, David y Betsabé, Antonio y Cleopatra, Romeo y Julieta, Don Quijote y Dulcinea. Todas estas parejas son ejemplo del amor humano, de ese amor del hombre y de la mujer que se entregan intensamente al ser amado. Por ese amor dan hasta la vida. Porque al fin de cuentas, el amor es la fuerza más potente del mundo. Ahora bien, el «amor» que Scott Sloggett tenía por las muñecas de Glen Offield no era más que codicia, pues buscaba beneficio monetario. Él quería hacerse rico con una colección que era única. Pero si bien Scott sólo buscaba aumentar sus bienes materiales, muchas son las personas que se abandonan a la lujuria buscando el efímero y voluble placer sensual. Por entregarse al deseo de la carne abandonan esposa, hijos, respeto, conciencia y hasta el alma, no queriendo reconocer que la lascivia es una apetencia que mata. A Scott Sloggett lo abatió la avaricia. Al adúltero lo consume su lujuria. Grande ha sido el amor de los famosos amantes de la historia. Todos ellos le dejaron una valiosa lección a la humanidad: que el amor pasional que se manifiesta en la intimidad fuera del matrimonio —amor que se sale de los linderos establecidos por Dios— produce caos en el individuo, en la familia y en toda la sociedad. Pidámosle a Dios sobriedad. Los que tenemos a Cristo en el corazón y obedecemos sus mandamientos, vivimos en paz. Tenemos, además, la absoluta seguridad de vida eterna. Obedecer a Dios es hallar serenidad. Sus leyes no son penosas, y quienes las obedecemos experimentamos perfecta armonía. Cristo desea ser nuestro Salvador. Hermano PabloUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net
Más episodios del podcast Un Mensaje a la Conciencia
«Mi esposa no deja de recordarme mi error»
15/11/2025
«Por salvar la patria»
14/11/2025
¿Insistir en casarse con un agresor?
13/11/2025
Decisiones de vida o muerte
12/11/2025
¿«Estamos muy jóvenes para casarnos»?
10/11/2025
«Trato de apartarme de los demás»
08/11/2025
«El provecho de la agonía»
07/11/2025
«No sé cómo acercarme a mi esposa»
06/11/2025
«Este volver a Honduras»
05/11/2025
ZARZA Somos ZARZA, la firma de prestigio que esta detras de los grandes proyectos en tecnología de la información.