Una mirada hacia atrás en la relación que tu has tenido con tu padre, te podría regalar información muy importante sobre ti, y apoyarte en tu relación con tus hijos como Padre.
Muchos padres entendemos que ser responsable solo se limita a proveer a nuestros hijos de forma económica e inclusive muchos padres se matan trabajando con tal de que no les falte nada y garantizarles un futuro a veces mejor que él de nosotros mismos. Sin embargo aunque es muy digno de respetar y admirar, descartan quizás la parte más importante: el desarollo emocional de sus hijos. ¿Qué estás sembrando actuando solamente como proveedor de tus hijos?, y no digo que este mal, es la manera inconsciente en que actuamos.
Por qué será que en muchos casos, ese niño que hoy ya es adulto, al ser cuestionado sobre qué fue lo que más le hizo falta de sus padres, las respuestas más comunes son: su amor y su presencia. El tiempo pasado con ellos en una conversación, un consejo, una mirada con atención es el tiempo mejor invertido con nuestros hijos, estamos conectando con el ser que son, y en esta etapa de niñez siempre escucharlos, entenderlos y proveerles el apoyo emocional adecuado siempre será lo mas importante.

Al final le estamos dando lo que entendemos que “necesitan” pero no realmente no que NECESITAN y obviamente, es de esperar que al igual que nosotros ellos repetirán seguramente ese mismo patrón con sus propio hijos.

Quizás es tiempo de hacer un STOP y empezar a escucharlos con atención y preguntarles lo que realmente quieren, o necesitan, les aseguro que se llevarían mucha información.

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