El 23 de octubre del año pasado el presidente Luis Abinader negó de manera enfática que desde República Dominicana se trasegara armas hacia Haití como  había informado nada más y nada menos que en un grupo de expertos  de las Naciones Unidas que visitó la isla.
Como en República Dominicana no se producen armas y hay que creer que la autoridad tiene control sobre las que ingresan al país el tema no pasó  de la respuesta del presidente en La Semanal.
Pero el mundo existe además de República Dominicana y los miembros de la misión de Naciones Unidas que trata de pacificar Haití identificaron municiones de la policía dominicana en manos de las bandas haitianas.
Hay que suponer que esa misión, que fue intensamente demandada por el presidente Abinader, mostró pruebas de esas municiones y que en RD no se pudo cerrar los ojos a la realidad.
Una nota del Diario El Día publicada hoy confirma que fue la alerta de la ONU lo que motivó la investigación local que ha identificado a un número indeterminado de coroneles y oficiales subalternos que participaron de la mafia.
Todavía se insiste en decir que el grupo realizaba extracciones irregulares de municiones, lo que se parece mucho a robar pero como dije la semana pasada los coroneles no roban aunque pongan en ridículo al mismo presidente de la República.
Cuando alguien se roba un racimo de platanos de inmediato se publica el nombre y si es posible una foto. En este caso que se atenta contra la seguridad nacional porque la inseguridad en Haití atenta contra la seguridad nacional y eso también lo ha dicho el primer mandatario, todo está en la neblina.
Pareciera que hay niños y niñas metidos en el asunto y que los medios y la propia autoridad omite los nombres por razones legales.
Un cabo me informa que todo está esclarecido, que se sabe lo que ha pasado y las responsabilidades que el problema es la gestión que están haciendo los involucrados para ser excluidos del sometimiento  al Ministerio Público.

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