El azufre es un elemento esencial para la vida, como la formación de proteínas y de muchos procesos biológicos de gran importancia. Pero también se trata de un contaminante primario que cuando se encuentra en la atmósfera es susceptible de transformarse en anhídrido sulfúrico mediante oxidación. El origen fundamental del dióxido de azufre hay que buscarlo en los procesos de combustión de combustibles fósiles, principalmente carbón y derivados del petróleo.

En la actualidad la refinación del crudo deriva en una concentración de 500 partes por millón (ppm) y ante la crisis del cambio climático existen esfuerzos para reducir a 15 ppm dicha concentración y "limpiar" los combustibles fósiles.

Hablaremos de este trabajo de investigación con el M.C. Edgar Arévalo Basañez del Posgrado en Ciencias en Ingeniería Química de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.

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