Aunque ficha por Geffen Records, el resultado de los tres álbumes con ellos sigue sin darnos el sonido del verdadero John Hiatt, excepto en momentos puntuales, como esa cara B del Riding With The King, producida por John Lowe.
Resuelta finalmente su adicción, pero con el tremendo suicidio de su esposa, decide abandonar Los Angeles con su hija Lily y encaminarse a Nashville. Allí volverá a escribir canciones extraordinarias, y con la ayuda de amigos de aquí y fans del Reino Unido conseguirá el dinero suficiente para grabar su primer álbum completamente sobrio y en pleno control de su facultades.
En 1987 entrará en el estudio junto a Ry Cooder, Jim Kettner y Nick Lowe. Grabado en tan solo 4 días, en directo total, la calidad de los músicos y de las canciones de Hiatt serán responsables de uno de los mejores álbumes de los últimos 40 años en EEUU.
Lo escucharemos completo, conociendo como se concebíos y c-omo se llegó a esta verdadera obra maestra.

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