Viaje a ninguna parte. La Veranda de Rafa Rius 02/10/25

05/10/2025 6 min
Viaje a ninguna parte. La Veranda de Rafa Rius 02/10/25

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Síntesis del Episodio

El proceso es siempre el mismo: en primer lugar, los señalas, después los estigmatizas y finalmente, sales a cazarlos.
Benjamín Prado

EL JOVEN estudiante Raskólnikov se arrodilla ante Sonia, la prostituta. Atormentado, implora secretamente un castigo para su crimen, pero ¿cómo va a lograrlo?: él sabe lo que ha hecho, ella no. ¿Por qué te arrodillas ante mí?, pregunta Sonia, avergonzada. No me arrodillo ante ti, responde él, me arrodillo ante toda la humanidad sufriente.
Dostoiewsky

Un patriota: un idiota
P.A.R.R.U.S


Como nos contaba Fernán Gómez, hay viajes que no van a ninguna parte, porque vayan donde vayan, están condenados al rechazo y el sufrimiento. Dentro de la humanidad doliente, hay un grupo de personas cada vez más numeroso, que no mueren donde nacieron, y no por voluntad propia; se trata de los transterrados. El diccionario nos cuenta que son aquellas personas expulsadas de su tierra por motivos políticos: Pero ¿qué motivos no lo son? ¿acaso el hambre o la guerra o el color de la piel o la homosexualidad o la condición de mujer… no son motivos políticos?

A lo largo de la historia y en todos los continentes, numerosas personas se han visto obligadas por distintos motivos a desplazarse a otros territorios por pura necesidad y, a partir de ello, el mestizaje genético y cultural ha sido inevitable; por eso, hablar en estos momentos de purezas raciales o de patriotismos exacerbados es una idiotez incongruente.

Como señalaba Ciro Alegría, el mundo es ancho y ajeno, es decir: es muy grande y no es propiedad de nadie. A pesar de esa evidencia, en muchos lugares del mundo existen grupos de descerebrados ignorantes que se emborrachan con estériles patriotismos y siguen el acertado diagnóstico de Benjamín Prado: primero identifican al otro, después lo denigran y por último salen a cazarlo. En esto, lamentablemente, España podría ser un paradigma.

En cualquier caso, es estupidez en estado puro; en primer lugar, porque hacen por ignorar que todos somos de alguna manera migrantes, todos hemos venido en algún momento de algún otro lugar, incluso, por supuesto, ellos mismos; en segundo lugar, porque ni siquiera sirven a los intereses de aquellos que los financian. Los empresarios de los tres sectores productivos son los últimos interesados en frenar la entrada de mano de obra barata, con poca cobertura social, que les asegura una inagotable fuente de explotación laboral.

Y es que, las fronteras, esa aberración proteccionista de intereses bastardos, no son sino obstáculos de papel. Por muy altos que sean sus muros, en último extremo, podrán dificultar, pero nunca podrán detener el flujo interminable de personas que huyen de situaciones insoportables. Así que, Europa -cuyo nombre proviene, por cierto, de una diosa nacida en las costas asiáticas de Turquía- continuará recibiendo, por muchos FRONTEX que se invente, por mucho que conviertan el Mediterráneo en un cementerio marino, una corriente interminable de personas procedentes de otros lugares, como ha venido ocurriendo a lo largo de toda la Historia.

Así que, luchemos contra el fascismo racista y la aporofobia y convirtamos las calles en un mosaico de gentes y culturas. Mejor nos irá.