Todos los que somos padres sabemos que las relaciones con nuestros hijos se nutren de amor y cariño pero que también hay problemas y dificultades. Así que no es difícil de entender que la Biblia use esta relación padre hijos como metáfora de la relación entre Dios y su pueblo.
Esta comparación nos ayuda a entender el amor que tiene Dios por cada uno de nosotros.
Cuando hablamos del amor o de la disciplina de Dios no tenemos que entenderlo como sentimientos sino que son dos formas de entender el pacto que media la relación de Dios y su pueblo.
Cuando la Escritura nos habla de que Dios ama a su pueblo eso significa que es fiel al Pacto. Que nos ama y que va a hacer todo lo posible porque su pueblo también sea fiel
Pero sobre todo si algo significa que Dios ama es que va a seguir siendo fiel
al pacto incluso aunque su pueblo se muestre infiel y esta es la manera principal en que la Biblia nos muestra que Dios nos ama
De todo esto nos habla el profeta Oseas.

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