Cuando las cosas van bien vamos arrastrando ese bien estar interior a la siguiente actividad o encuentro que tenemos. Y lo mismo pasa cuando las cosas empiezan a ir mal.

A veces basta que alguien diga algo que me desagrada o molesta para que el resto del día sea mucho peor.

Es muy probable que haya momentos en los que nuestro día se tuerza pero, ¿qué podemos hacer para que ese momento no influya en el resto de mi día o de los siguientes días?

En el podcast de esta semana comparto contigo los 3 pasos que yo sigo para impedir que mi día se tuerza por completo.
3 ideas sencillas pero muy útiles.

Te deseo un día muy feliz, ¡con o sin contratiempos! :-)

Un abrazo muy fuerte,
Mónica

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