POCA CONFIANZA EN DIOS

La falta de retención mental selectiva es un problema frecuente entre las personas, pues fácilmente se olvidan de las cosas que son realmente importantes, pero son capaces de retener las cosas banales de la vida. Este problema también es frecuente entre los creyentes, ya que algunos de ellos con total facilidad se olvidan de las enseñanzas de las Sagradas Escrituras, así como de todas las bendiciones que reciben de las manos generosas de Dios. Cuando los creyentes se olvidan de estos hechos importantes para su vida espiritual, se afligen fácilmente ante cualquier necesidad que les sobrevenga, pues no tiene confianza en Dios como su proveedor. Esta falta de confianza en Dios, también fue evidente entre los discípulos de Cristo, razón por la cual su Maestro les amonestó: “Los discípulos comenzaron a hablar entre ellos, y decían: Seguramente Jesús dijo eso porque no trajimos pan. Jesús se dio cuenta de lo que hablaban, y les dijo: ¡Qué poco confían en Dios! ¿Por qué se preocupan por no tener pan?” Mateo 16:7-8 TLA.

Siguiendo con su travesía ministerial, Jesús y sus discípulos se habían embarcado para cruzar al otro lado del mar de Galilea. Ya estando en la barca, los discípulos se dieron cuenta de que no habían comprado suficiente pan para la siguiente misión, razón por la cual empezaron a inquietarse, Jesús al darse cuenta de esta situación entre sus discípulos les advirtió que tuvieran cuidado con la levadura de los líderes judíos. Los discípulos no entendieron esta advertencia, razón por la cual nuevamente empezaron a discutir entre ellos. Jesucristo ante esta situación, los amonestó por la poca fe que tenían. El Señor al referirse a la levadura de los líderes judíos, se estaba refiriendo a su fe y enseñanzas distorsionadas. Los discípulos al igual que los líderes religiosos del pueblo hebreo, estaban preocupados más en lo material antes que en lo espiritual.

Los discípulos estaban preocupados más en el pan material antes que confiar en las provisiones de Dios. Ellos se habían olvidado de las enseñanzas de su Maestro, al igual que de sus señales milagrosas. Jesús les había enseñado como Dios provee cada una de las necesidades de sus criaturas, como da las mejores vestimentas a las flores, y como alimenta a las aves del cielo. Además, Él mismo había alimentado en presencia de sus discípulos a cinco mil y luego a cuatro mil hombres tan solo con pocos panes y peces, por eso no tenía sentido que ellos se preocuparan por no tener suficiente pan, si estaban junto al Unigénito Hijo del Dios Viviente. Pero los discípulos se preocuparon debido a que no retuvieron las enseñanzas y señales milagrosas de su Maestro. Al igual que los discípulos, nosotros nos preocupamos por la falta de pan por nuestra poca fe en Jesucristo como nuestro proveedor.

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