Tras varias jornadas de alegato,los fiscales Mola y Lusciani finalmente pidieron este lunes por la tarde para Cristina Fernandez 12 años de prisión y no poder ejercer más cargos públicos en su vida al considerarla jefa de una asociación ilícita por la obra pública, destacando su rol como presidenta en los presupuestos, su relación comercial con Báez, los funcionarios de confianza en áreas clave y los mensajes del celular de José López. Tras conocerse el pedido del Fiscal Luciani comenzó a congregarse gente en la esquina del departamento de la vice presidenta en Barrio Norte al grito de "Chorra", lo que generó que aparecieran también partidarios de Cristina por lo que la policía debió intervenir separando a los manifestantes.

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