La Fiscalía se opuso a la incorporación al sumario del caso Begoña Gómez de los correos electrónicos intercambiados entre la esposa del presidente del Gobierno y su asesora, Cristina Álvarez, con el vicerrector de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Juan Carlos Doadrio.

Doadrio, que declaró como testigo en el juzgado, explicó las gestiones mantenidas con ambas en relación con el máster que dirigía Gómez. Según relató, en un primer momento trató directamente con la esposa de Pedro Sánchez, aunque posteriormente la interlocución pasó a manos de su asistente. Para acreditarlo, aseguró conservar “ciento y pico” correos electrónicos.

El juez Juan Carlos Peinado ha imputado tanto a Gómez como a Álvarez por un presunto delito de malversación de fondos, al considerar que la esposa del presidente utilizó a una asistente de Moncloa —remunerada con fondos públicos— para atender sus actividades privadas.

Las acusaciones populares solicitaron la incorporación de los correos al procedimiento para reforzar sus sospechas y esclarecer el grado de implicación de Álvarez en esas gestiones particulares. No obstante, el Ministerio Público se pronunció en contra, argumentando que dichas pruebas serían “excesivas, reiterativas y superfluas”.

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