¿Marcas EUROPEAS? ¿CHINAS? ¿O “EURO-CHINAS”?

20/10/2025 18 min
¿Marcas EUROPEAS? ¿CHINAS? ¿O “EURO-CHINAS”?

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Síntesis del Episodio

Hoy vamos a hablar de un tema que me parece clave para entender no solo el presente sino, sobre todo, el futuro inmediato del automóvil. Vamos a responder a dos preguntas aparentemente sencillas: ¿Qué significa hoy en día "Made in Europe"? ¿Qué significa "Made in China"? Olvídate de todo lo que creíais saber, porque las viejas etiquetas ya no sirven.

Y ahora, vamos con los “euro-chinos”. Porque la “paternidad” de los coches, fruto de las alianzas, cada vez es menos clara. Una nueva generación de automóviles está conquistando nuestras carreteras. Son coches nacidos de esas alianzas que hace apenas una 5 o 10 años nos habrían parecido ciencia ficción.

La unión “euro-china” tiene sus ventajas, pues por un lado tienes tradición, ingeniería y diseño de Europa con el músculo financiero y la increíble agilidad productiva de China.

Y que nadie se confunda: hoy no hablamos de copias, ni de imitaciones baratas. Hablamos de una fusión estratégica y, por lo general, inteligente que está redibujando por completo el mapa mundial del motor. Todavía hoy cuando escuchamos "coche chino", nos viene a la cabeza la imagen de un producto de calidad dudosa. Y esto está cambiando a toda velocidad.

El desembarco de las marcas chinas en Europa no es una simple invasión comercial al uso: Va más allá, es me atrevo a decir, más peligrosa. Es un movimiento sutil y brillante, porque los gigantes industriales chinos han entendido que para conquistar el exigente mercado occidental no basta con ofrecer un precio bajo.

Se necesita diseño, tecnología punta, una seguridad incuestionable y, todavía hoy, sigue ayudando mucho una marca de confianza, una tradición, una historia, un ADN. ¿Y dónde se encuentra todo eso en abundancia? Exacto, en Europa. Por otro lado, marcas europeas con décadas de historia, algunas de ellas en dificultades e incluso al borde de la desaparición, han encontrado en el capital chino el salvavidas que necesitaban.

Pero no ha sido un simple rescate. Ha sido una inyección masiva de recursos con la idea de reinventarse y posicionarse como líderes en la nueva era eléctrica. Para hacerlo más fácil, vamos a dividir este fenómeno en tres grandes categorías:

Primero, las joyas de la corona europeas que ahora tienen un pasaporte chino.
Segundo, las nuevas marcas chinas que han nacido y crecido con un cerebro y un alma de diseño europeo.
Y tercero, los matrimonios de conveniencia más recientes, donde dos gigantes se unen para crear una nueva generación de vehículos.

Para mí no todo han sido aciertos… hay de todo. Nosotros te lo contamos y tu juzgas. ¡Vamos allá!

Categoría 1: Legado europeo con corazón oriental.
Aquí es, quizás, donde encontramos las historias más potentes.

Lotus. De la ligereza al Hiper-SUV Eléctrico.
MG. El Renacer del icono británico.
Volvo y Polestar. Modelo de éxito.

Categoría 2: Marcas chinas con cerebro europeo.
BYD. El gigante que fichó a las estrellas.
Lynk & Co. El “Netflix” del automóvil.

Categoría 3: Matrimonios de Conveniencia…
Smart. Revolución Germano-China.
Stellantis y Leapmotor. Un “balón de oxígeno”.

¿Vendrás más?
Volvo, MG, Lotus... la lista crece. Y seguirá creciendo. Como veis, el panorama del automóvil ha cambiado para siempre. Ya no se trata de dónde se ensambla la última tuerca, sino de dónde provienen el capital, la tecnología, el diseño y la estrategia. Esta fusión "euro-china" está acelerando la transición eléctrica y aumentando la competencia, lo cual es bueno para nosotros.

Surgen muchas preguntas: ¿Es menos europeo un Volvo por tener un dueño chino que ha potenciado su herencia? ¿Es menos chino un BYD por haber sido diseñado por un alemán? Las etiquetas son cada vez más difusas, los estereotipos desaparecen.

Hay dos cosas que importan. Una, el producto final. Y muchos de estos coches "euro-chinos" son productos y muy competitivos.

Y dos, ¿Dónde van a parar los beneficios? Este asunto, a futuro, es también muy importante… la preponderancia de las marcas europeas y japonesas, está llamada a desaparecer.

Conclusión.
El concepto de coche "nacional" se va desvaneciendo. Marcas históricas europeas sobreviven gracias a esta unión, mientras que nuevas marcas chinas conquistan nuestro mercado adoptando un alma europea. Esta fusión está acelerando la electrificación… si es bueno o malo, lo veremos con el tiempo.