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Hoy quiero hablaros del poder del pensamiento positivo y la visualización. Esto no significa que vivamos de espaldas a la realidad, es sólo que veamos el vaso medio lleno en lugar de medio vacío y que a la vez nos enfoquemos en pensar nuevas formas para seguir rellenándolo día tras día.

¿ Me acompañas por este camino de crecimiento personal a través de 5 sencillas prácticas?

1. Revisa tu postura y lenguaje no verbal.
Más del 80% de la información que lanzamos al exterior es lanzada a través de nuestros gestos y sólo el 20% es la que pronunciamos. ¿Estás más encorvado que de costumbre, frunces el ceño habitualmente o tal vez sientes que estás siendo mal percibido? Un mal lenguaje corporal puede dañar tu autoestima y mermar tu confianza lo que definirá cómo proyectes tu vida. Intenta sonreir más a menudo y trabaja una postura corporal más abierta hacia los demás. Con ello promoverás un estado mental y emocional donde los pensamientos negativos se alejen poco a poco.

2. Aborda los problemas abiertamente
Expresar el miedo, el fracaso o los problemas que podamos tener es curativo si se hace en un entorno de confianza y donde el objetivo sea buscar soluciones y no responsables. Guardar malas sensaciones y no compartir nuestros problemas o desilusiones lleva a que esos problemas crezcan más y que sea más difícil borrarlos de nuestra mente. Déjalos fluir y comienza a trabajar en tu nuevo yo.

3. Cambia la perspectiva de las cosas.
En ocasiones no ver las cosas positivas de la vida tiene que ver con que estamos viendo nuestra realidad desde una perspectiva equivocada. Prueba a cambiar el enfoque y verás cómo cambia la situación. Por ejemplo: en lugar de pensar ¿Quién me mandaría hacerme emprendedor? Prueba a pensar “Estoy haciendo realidad mi sueño, me está exigiendo mucho de mí pero sé que estoy dando lo mejor de mí”.Esta perspectiva y discurso interior cambiarán tu día a día e incluso el resultado. Práctica el cambio de perspectiva y verás como cambian las cosas.

4. Alimentación y práctica de ejercicio.
La mente y el cuerpo están totalmente conectados y tanto uno como el otro funcionan como un todo. Si estamos mal alimentando a nuestro cuerpo y no estamos practicando, nuestra mente se va a resentir. Evita estar con personas o ambientes negativos ya que es fácil que contagien esa negatividad. Regálate un paseo que activa regiones cerebrales que permanecen casi inactivas cuando estamos sentados. Cuando practicamos ejercicio y nos movemos nuestro estado de ánimo mejora.



5. Visualiza
¿Donde te ves en diez años? Visualízate y pon en un papel los 10 pasos que vas a seguir para conseguir hacer realidad tu sueño. Es importante que sean metas cuantificadas y que puedas volver a repasar para ver si lo estás consiguiendo y si no es así buscar la forma de conseguirlo. Trabaja en tu futuro y mira la vida con optimismo y positivismo. Lo vas a conseguir.

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