Jesús Nuestro Hombre en la Gloria - A. W. Tozer

Pocos cristianos son totalmente conscientes del oficio sumo sacerdotal de Cristo entronizado. Sospecho que éste es un tema descuidado en la predicación y enseñanza evangélica. Es un tema principal en la carta a los Hebreos. La enseñanza está clara: Jesús está ahí, resucitado y glorificado, a la diestra de la Majestad en las alturas, representado a los hijos creyentes de Dios, su iglesia en la tierra. Aquí tenemos uno de los grandes alientos bíblicos para reconocer a Jesús y para confiar en Él en su ministerio sacerdotal en nuestro favor: Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que pasó a través de los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que ha sido tentado en todo según nuestra semejanza, excluido el pecado. Acerquémonos, pues, confiadamente el trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. Las Escrituras nos aseguran que hay un verdadero tabernáculo, un verdadero santuario en el cielo. Jesús, nuestro gran Sumo Sacerdote, está activo allí. En aquel santuario celestial hay un altar continuo y eficaz. Hay un propiciatorio. Lo mejor de todo es que nuestro Mediador y Abogado está allí a favor nuestro. ¡Qué verdad tan asombrosa! Asombrosa, y sin embargo ¡cuán difícil nos parece asimilarla y contar con ella! A la luz de la revelación de Dios en gracia, solo puedo preguntar con humildad y desazón: “¿Por qué somos tan ineficaces en nuestra representación de Él? ¿Por qué somos tan apáticos en vivir para Él y gloriarle?”.

Jesús Nuestro Hombre en la Gloria - A. W. Tozer

Últimos episodios del podcast Jesús Nuestro Hombre en la Gloria - A. W. Tozer