Hoy vamos a hablar de algo que a muchos nos cuesta ver, pero que todos hemos experimentado en mayor o menor medida: la necesidad de reconocimiento. Todos deseamos sentirnos valorados, pero cuando esa necesidad se vuelve el centro de nuestras interacciones, puede afectar negativamente nuestras relaciones y nuestro crecimiento personal.
A continuación, exploraremos cuatro actitudes que reflejan esta búsqueda constante de reconocimiento y cómo podemos trabajar en ellas para ser más auténticos y humildes.

Citarte a ti mismo como ejemplo en las conversaciones.

Oír con complacencia que te alaben o alegrarte de que hablen bien de ti.

Insinuar en la conversación palabras que alaban tus logros, ingenio, o prestigio profesional.

Hablar mal de ti mismo para que te contradigan o formen un buen juicio de ti.

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