Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.
S. Juan 6:38 RVR1960 

 Nos  sujetamos al Espíritu Santo

Dios diseño la salvación, para devolvernos su presencia, Jesús rompió lo torcido e iniciuo y restauró la relación con El Padre, nos salvo  para que podamos reencontrarnos con Él. Está mañana Dios nos llama a ¡Rendirnos! Dejar de luchar con lo que nos queda de fuerzas y aprender a entregarle el control. Quizás estás atravesando por una situación difícil, confusa, de angustia, donde sientes que no puedes hacer nada más al respecto. Ríndete y entrégale todo a Dios. Pon tu vida y las situaciones que estás viviendo, en manos del Espíritu Santo. Él podrá llevar el control y podrás prosperar en cada área de tu vida. 
Recuerda que en Juan 14:16 Jesús nos prometió que vendría el Consolador que estará con nosotros siempre.

Solo podremos tener más de Dios en la medida de que Él tenga más de nosotros. Al entregar nuestra voluntad y rendirnos  a la obra del Espíritu Santo, podremos ver la Gloria de Dios y tú futuro estará impregnado, lleno de su gloria. Verás al Espíritu Santo moverse y operar en tu vida.Quiero hablarte hoy:
Sobre el movimiento y el operar del Espíritu Santo, esto me maravilla,  Ayer veíamos que Jesús al obedecer el Bautismo en agua , El Espíritu Santo descendió como paloma sobre El.
La paloma aparece en muchas partes de la Biblia representando la obra del Espíritu Santo,  se mueve y desciende con suavidad como una paloma pero no es una paloma ,este, como es un símbolismo que nos permite comprender con  facilidad verdades espirituales.
 Podemos extraer algunas enseñanzas para nuestra vida, veamos entonces que la paloma se mueve sobre las circunstancias, dice Génesis 1:1-2 “En el principio creó Dios los cielos y la tierra. 2Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”.

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