Si conoces los gustos, aficiones, necesidades, pasatiempos, etc de tu esposo podrás complacerlo y hacerlo sentir lleno en su hogar, sino él buscará afuera lo que no encuentra en su hogar!

Como hemos hablado, nosotras somos las constructoras o destructoras de nuestro hogar, dependiendo de los pensamientos, decisiones y acciones que vayamos tomando.
Si tus accciones, decisiones y pensamientos no están siendo de agrado para tu esposo, mucho menos serán de agrado al Señor.
Si tu misión es deleitar a Dios y complacerlo, también deleitarás y complacerás a tu esposo!
Conoces a tu esposo? Sus necesidades? Sus gustos?
o el tiempo se ha encargado de hacértelos olvidar?
No importa si tu esposo merece que tu lo conozcas y quieras darle gusto, lo importante es que aceptaste un rol de Dios y ese rol implica que en todo lo que hagas debes pensar en agradar a Dios y cumplir sus instrucciones, aun en el matrimonio.
Aquí también aplica: debemos amarnos y perdonarnos los unos a los otros...

Ver todos los episodios