Nació en medio de bombardeos, fusilamientos y  balaceras desatadas por un golpe de Estado. El 11 de septiembre de 1973, en Chile, Augusto Pinochet derrocó por las armas al presidente Salvador Allende. Un mes después Tatitana Fiordelisio vio la luz. 
En 2020, inventó una prueba rápida y barata para detectar covid-19. Y aunque su inventó se vio frenado por la burocracia, Fiordelisio hoy planea usarlo podrá detectar diabetes, problemas de tiroides, influenza y Zika. 
Su anhelo: que las comunidades indígenas y rurales, sin acceso a hospitales, tengan una herramienta de diagnóstico confiable y barato para distintas enfermedades. Se trata, dice, de una aplicación de la ciencia con mirada zapatista.

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