Vida en la gracia nueva de obediencia, castidad y pobreza Obediencia, castidad y pobreza no son un suicidio del espíritu humano, sino su vida en una gracia nueva.(Del comentario) En este nuevo año que acaba de empezar, nos dejamos acompañar por estas palabras de Adrienne, de una exigencia tan grande.Un nuevo inicio ya a nivel humano requiere cambios, iniciativa, entrega, coraje… ¿Cuántas veces hemos tenido propósitos nuevos, incluso proyectos de mejorarnos en algo nosotros, y en relación con los demás, en momentos determinados de nuestras vidas?Estas decisiones pueden coincidir con fechas temporales que adquieren, por diferentes razones, una significación para nosotros, una significación que nosotros mismos les damos, tal vez precisamente para tomarlas como ocasión de algún cambio […]El sí es la pauta permanente del obrar de MaríaY dentro de esta vida, para María el sí se transforma en la pauta permanente de su obrar. Ella no puede ni quiere moverse fuera de su línea. El espíritu del sí determina perfectamente su lejanía y cercanía a Dios.(Del comentario) Estas dos oraciones, que siguen inmediatamente la vida de gracia mencionada hace poco, nos muestran cómo, no sólo María puede vivir en la gracia los tres votos evangélicos, una gracia nueva, otorgada especialmente para sostenerla en ellos, sino que dentro del marco que estos votos indican hay también una pauta para su obrar, una pauta permanente.–––––––––––––––-El episodio ha sido transmitido en el marco del programa «Vida consagrada» de Radio María España el 11.1.24.Descargue el libro Ancilla Domini Más textos enbalthasarspeyr.org/es/publicaciones

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