La obra de Jesús en la cruz, es lo más valioso que podemos tener siempre y cuando creamos en lo que ahí hizo por cada uno de nosotros.

Muchas veces podemos pensar que Jesús no hizo nada por nosotros, porque su muerte no representa para nosotros algo físico, como bienes, hogar, trabajo, etc, sin embargo, la cruz representa el perdón de pecados y la vida eterna para todo el que cree.

Mostramos nuestra fe cuando llevamos la Palabra a la práctica, pidamos al Señor que nos ayude a transmitirla de manera limpia; pero entendamos que servir a Dios es el mayor honor y trabajo que podemos tener.

Jesús murió y resucitó y está en el cielo atento a sus seguidores, intercediendo por nosotros, así que no temamos seguirlo, él no quedo muerto para siempre, nos ha ofrecido la vida eterna y su Espíritu Santo, quien nos ayuda a vivir la fe.

Así que valoremos el sacrificio de Jesús, amémoslo y vivamos para él.

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