Jesús llega al templo en Jerusalén y observa que le están dando el uso incorrecto, así que corrige a los que estaban ahí, incluyendo a los Sacerdotes, fariseos, vendedores y cambistas, y termina diciéndoles que él puede levantar el templo en tres días, pero se refería a su cuerpo, no al templo físico.

La pregunta a realizar es: ¿Sólo Jesús es templo de Dios?

No, uno de los regalos dados por Dios, es que ahora nosotros pasamos a ser su templo cuando hemos creído en Él y en la obra de Jesús.

Algo que debemos tener en cuenta es que podemos darle un uso inadecuado a nuestro espíritu y cuerpo, y causar que Dios se aparte de nosotros, y ya no seamos su templo.

Así que la invitación es a que leamos la Palabra para que en ella encontremos quien viene a habitar en nosotros, a su vez cómo lo podemos cuidar; esto es sumamente importante, porque podemos dejar de ser el templo de Dios.

Escucha este podcast y compartelo, para que todo el que cree en Dios cuide su vida, que ahora es templo del Señor.

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