Jesús vino a librarnos de la mentira y los lazos de Satanás y del pecado, esto lo recibimos cuando creemos en él y en su Padre. El mundo nos exige una vida dedicada a trabajar con el fin de lograr los bienes, servicios, relaciones afectivas, etc, que necesitamos o nos imponen, no quedando tiempo para lo más importante que es la vivir en la tierra la vida abundante que Jesús nos da, no esperemos a llegar al cielo. Jesús vino a darnos una vida plena y abundante, dejemos a un lado el pecado y el correr para lograr lo pasajero, sirvamos en todo lugar a Dios y el gozo será constante. ¿Quieres tener una vida abundante? Lee la Palabra y ejecuta las instrucciones dadas por Dios. No dejes de compartir este episodio, la gente necesita saber lo sencillo que es vivir plenamente como Dios lo desea.

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