Juan Iranzo cultiva en su obra la pasión por el universo taurino y el arte flamenco. Dice que “Camarón es al flamenco lo que José Tomás al toreo”. Empezó a estudiar Bellas Artes, pero salió corriendo de la Facultad ante tanto descontrol y anarquía. Para la creación de sus obras devuelve a la vida materiales corrientes reciclados como vigas de madera o ramas caídas, piezas de hierro y chapas metálicas desahuciadas, ladrillos o cascotes rescatados entre los escombros. Juan Iranzo “ve toros en todas partes”. Minimalismo y movimiento en su escultura, colorido y optimismo en sus ilustraciones. Cubismo Taurino desde la capital del Arte Mudéjar.

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