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Escuchar "Programa 21. Ser Humano, Jesús, Cristo. Caravana Hacia Shamballa"
Síntesis del Episodio
PROGRAMA NÚMERO VEINTIUNO DE LA SERIE DE CARAVANA HACIA SHAMBALLA. PROGRAMA BASADO EN LOS TEXTOS DE LA SABIDURÍA ANTIGUA, NICOLÁS Y HELENA ROERICH. PROGRAMA CONDUCIDO POR PACO ORTIZ Y LOLI BERMÚDEZ, DONDE COLABORAN HABITUALMENTE JESÚS JURADO, RICARDO CAMACHO Y ANA CASTRO
Tomando su cayado de bambú, trazó un cuadrado alrededor de la huella de su pie, diciendo, "En verdad, por pies humanos".
Y haciendo la huella de la palma de Su mano, la rodeó también con un cuadrado. "En verdad, por manos humanas".
Entre los cuadrados trazó la semblanza de una columna coronada por un arco. Él dijo, "Oh, ¡cómo penetrará Aum en la conciencia humana! Aquí he dibujado un pistilo y sobre él un arco, y he establecido las bases en cuatro direcciones. Cuando el Templo sea edificado por pies humanos y manos humanas allí donde florezca el pistilo puesto por Mí, que los Constructores pasen entonces por Mi Camino. ¿Por qué debemos Nosotros esperar el camino, cuando éste se halla ante Nosotros?"
El af 153 de HJM Iluminación describe el encuentro en el desierto de dos miembros de una caravana con Cristo; entre ellos se inicia una conversación y en un momento de la misma Cristo realiza en la arena unos dibujos que expresan Su Enseñanza. Nicholas Roerich aplicando la belleza y la síntesis del Agni Yoga pinta magistralmente esta escena, que representa la piedra angular de la Verdadera Enseñanza de Cristo: el Ser Humano está capacitado para desarrollar la naturaleza crística en su interior, para seguir Su Camino y para convertirse en Cristo, tal y como hizo Jesús de Nazaret.
Cuando el pistilo puesto por Cristo florezca en nuestro corazón comenzaremos a recorrer Su Camino. Cuando el Nombre del Templo construido por nosotros para honrar a Cristo sea pronunciado, el signo del pie y de la mano se escribirá sobre la Piedra Angular. Se habrá producido la 2ª venida de Cristo en nosotros, alabaremos a la Madre del Mundo como hizo Él y sufriremos la vejación del mundo como le sucedió a Él.
Abonemos el amoroso pistilo de Cristo que crece en nuestro corazón mediante la oración, porque “Una plegaria pura siempre asciende. Ante los pies de Cristo florece, plateada y radiante. Con una pura llama azul resplandece la Palabra de Llamada e irradia el Cáliz de la Exaltación.”
Tomando su cayado de bambú, trazó un cuadrado alrededor de la huella de su pie, diciendo, "En verdad, por pies humanos".
Y haciendo la huella de la palma de Su mano, la rodeó también con un cuadrado. "En verdad, por manos humanas".
Entre los cuadrados trazó la semblanza de una columna coronada por un arco. Él dijo, "Oh, ¡cómo penetrará Aum en la conciencia humana! Aquí he dibujado un pistilo y sobre él un arco, y he establecido las bases en cuatro direcciones. Cuando el Templo sea edificado por pies humanos y manos humanas allí donde florezca el pistilo puesto por Mí, que los Constructores pasen entonces por Mi Camino. ¿Por qué debemos Nosotros esperar el camino, cuando éste se halla ante Nosotros?"
El af 153 de HJM Iluminación describe el encuentro en el desierto de dos miembros de una caravana con Cristo; entre ellos se inicia una conversación y en un momento de la misma Cristo realiza en la arena unos dibujos que expresan Su Enseñanza. Nicholas Roerich aplicando la belleza y la síntesis del Agni Yoga pinta magistralmente esta escena, que representa la piedra angular de la Verdadera Enseñanza de Cristo: el Ser Humano está capacitado para desarrollar la naturaleza crística en su interior, para seguir Su Camino y para convertirse en Cristo, tal y como hizo Jesús de Nazaret.
Cuando el pistilo puesto por Cristo florezca en nuestro corazón comenzaremos a recorrer Su Camino. Cuando el Nombre del Templo construido por nosotros para honrar a Cristo sea pronunciado, el signo del pie y de la mano se escribirá sobre la Piedra Angular. Se habrá producido la 2ª venida de Cristo en nosotros, alabaremos a la Madre del Mundo como hizo Él y sufriremos la vejación del mundo como le sucedió a Él.
Abonemos el amoroso pistilo de Cristo que crece en nuestro corazón mediante la oración, porque “Una plegaria pura siempre asciende. Ante los pies de Cristo florece, plateada y radiante. Con una pura llama azul resplandece la Palabra de Llamada e irradia el Cáliz de la Exaltación.”