Es domingo 25 de febrero, mañana varios estudiantes empezarán a llenar salones, apropiarse de bancos y conocer nuevos profesores.



En este momento están por jugar un partido de fútbol Danubio con River Plate en el estadio Jardines del Hipódromo María Mincheff de Lazaroff.



Yo nunca presencié una charla técnica de Roberto Peirano, imagino podría llegar a dejar frases como “El orden táctico de los jugadores no altera la cantidad que hay en la cancha”, por ejemplo. Pero sí asistí a un montón de sus clases, y además de enseñarme sobre arreglos, combinaciones y permutas, tuvo la enorme capacidad de transferir todo su conocimiento enamorándonos con miles de metáforas futboleras para explicar cada concepto. El fútbol, decía el Flaco Peirano frente al pizarrón lleno de fórmulas, “es como las matemáticas, si no sabés las reglas no podés jugar”.



Como decías cuando no nos salían las cosas “cuando sacamos, y nos apedrean el rancho, la mandamos al óbol contra el córner y empezamos el partido de nuevo, presionando ahí”.



El Flaco nos dejó físicamente el viernes pasado y quiso el calendario, el destino o vaya uno a saber qué, que hoy jueguen Danubio y River. Hoy se cruzan en la cancha Pablo y Leo, sus hijos, uno dirigiendo a Danubio y otro en el cuerpo técnico darsenero.



Un pequeño recuerdo desde el Deportivo Uruguay en nombre de varios de tus alumnos que pudimos cruzarte en el camino de la vida.



¡Gracias Flaco!

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