En esos momentos en que la tristeza me invade, en que el miedo se apodera de mí, en que no sé bien cómo salir de esa situación que me puede, que veo cómo el ánimo decae y cómo siento que no puedo más, Señor, te pido hoy que me llenes de Vida, de la única Vida que puede aliviar, sanar y transformar mis desánimos, mis desalientos, mis cansancios. Ese cansancio que me puede, ese ánimo que me baja, esa oscuridad que a veces se cierne sobre mí.
Por eso, postrada ante ti mi Señor, con toda la humildad de la que soy capaz, te digo “DAME VIDA, DAME LA VIDA, DAME TU VIDA, SEÑOR”.

Adoración al Santísimo que tuvo lugar el jueves 15 de diciembre de 2016 en la Parroquia Nuestra Señora de África, de Madrid, sita en C/Algorta, nº 14 (metro entre Urgel y Oporto)

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