Los hosteleros del ocio nocturno, por fin veían la luz al final del túnel después de más de 100 días cerrados.
El empresario Víctor Andrés, que regenta varios locales de ocio en la zona del casco antiguo de Talavera, nos explica cómo ha transcurrido el primer fin de semana de reapertura en uno de sus locales.
Clientes enmascarados, pistas de baile, pero no para bailar, y algunas esperas en la puerta para acceder al local, son imágenes que traen las noches de la 'nueva normalidad'.
Los empresarios están poniendo todo de su parte; reparto de mascarillas, control de aforo, medición de temperatura, así como establecer las distancias de seguridad, "son nuestros clientes y tenemos que velar por ellos", apuntaba Víctor, haciendo referencia a que pondrán señalizaciones y pegatinas en el suelo de la calle para que se respeten las distancias establecidas.
A pesar de esta atípica forma de trabajar, el joven empresario se muestra optimista y agradecido a sus clientes, y espera que, poniendo todos de nuestra parte, podamos adaptarnos a la nueva normalidad.

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