Alemania da un paso firme para blindar su infraestructura crítica frente a riesgos tecnológicos procedentes de China.
El Bundestag ha aprobado una ley que otorga al Ministerio del Interior poderes para vetar componentes de fabricantes considerados peligrosos, como los de Huawei, en sectores clave como energía, transporte o sanidad.
La medida amplía el marco legal vigente en telecomunicaciones. El canciller alemán Friedrich Merz ha sido tajante al decir que no permitirá tecnología china en la futura red 6G.
Aunque el Ministerio ya podía intervenir en diferentes contrataciones desde el año 2021, nunca había bloqueado formalmente a ningún país. Ahora, con esta nueva ley, se abre la puerta a hacerlo en todos los sectores críticos. Aún así, el Bundesrat (la cámara alta) debe ratificar la norma.

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