Analizamos la conexión entre la energía sexual y el despertar espiritual, enfocándonos en la pulsión sexual vital que emerge a mitad de la vida, aproximadamente a partir de los 40 años. Esta fuerza representa un deseo profundo de Ser y cambiar, que a menudo genera una intensa tensión con el ego, el cual se resiste a perder el control y mantener el statu quo. La resistencia del ego puede manifestarse a través de dolores físicos y enfermedades, indicando una desconexión entre el cuerpo y el alma. La fuente explica que esta energía es el despertar de la Kundalini, una fuerza vital que asciende por la columna vertebral, proceso que solo es sano si ocurre después de la madurez que provee Saturno. Cuando se permite que esta fuerza circule, la persona experimenta una sexualidad más satisfactoria e integrada, siempre y cuando haya resuelto las limitaciones impuestas por mandatos sociales o familiares.

Del libro AstroHología volumen dos, de Maiorana y Luna.

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