En el episodio número 14 de «¡Hala Madrid!» vamos a analizar la semana del Realmadrid Baloncesto, una semana que fue de gran contraste: comenzó con la consecución de un objetivo importante y terminó con un "pinchazo" calificado como "desastre".

En el primer partido de la semana, los blancos lograron una "cómoda victoria" (85-72) en Euroliga ante el ASVEL Villeurbanne, un triunfo "plácido" que les permitió dar "otro pasito hacia adelante" en su proceso de construcción. Este éxito fue liderado por Chuma Okeke, quien tuvo su "primera gran noche" con 17 puntos sin fallo. No obstante, la semana concluyó con una "derrota penosa" (105-100) en Liga Endesa ante el Baskonia, donde el Madrid desperdició una ventaja inicial de 20 puntos (20-40). Esta caída expuso carencias importantes, como la "defensa inexistente", la falta de "disciplina, frialdad y concentración", y el "problema dramático del pívot suplente", a pesar del gran partido de Trey Lyles (24 puntos, 30 de valoración). La derrota en Vitoria cortó la racha de tres victorias consecutivas de los blancos en casa y forzó al entrenador Sergio Scariolo (quien previamente había considerado las bajas como "oportunidades" de progresión para Feliz, Almansa y Lyles) a lamentar la falta de "continuidad" y "cohesión" del equipo.

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