El destructor USS Gravely de la Armada estadounidense arribó a Trinidad y Tobago como parte de un despliegue naval en el Caribe, cerca de las costas venezolanas. Aunque el gobierno local lo describe como una colaboración en seguridad, varios líderes del Caricom expresaron preocupación por la creciente presencia militar. Las maniobras se enmarcan en operaciones antidrogas que ya han dejado 43 muertos en ataques a presuntas embarcaciones de narcotráfico.Lucas y Clara comentan: Cuando los barcos llegan con bandera de paz, todos miran primero si traen cañones.📧 [email protected] 🌐 www.elcomercio.com

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